Los aranceles de represalia de la Unión Europea a los de Donald Trump se lanzarán en tres fases: el 15 de abril, el 16 de mayo y el 1 de diciembre.
Así lo indica el borrador del documento, que será votado este miércoles por los países miembros en el comité técnico de la Comisión Europea (en la jerga, comitología).
Tras la votación de los Veintisiete, Bruselas notificará la decisión al Consejo del Comercio de Mercancías de la Organización Mundial del Comercio (OMC) antes del 15 de abril.
Esta es la repuesta de Europa a los aranceles del 20% que Trump impuso a todos los productos europeos. En una primera reacción, la UE ofreció a Trump aranceles cero en productos industrializados, pero el jefe de la Casa Blanca dijo que no era suficiente.
Qué productos quedarán afectados
La Unión Europea tiene previsto introducir derechos de aduana del 25% sobre numerosos productos agrícolas como la soja, las aves de corral, el arroz y varias frutas. La mayoría de estos impuestos podrían entrar en vigor a mediados de mayo, si los Estados miembros de la UE están de acuerdo. Algunos derechos, sobre las almendras, por ejemplo, no entrarían en vigor hasta diciembre.
Para evitar posibles represalias contra los vinos y licores europeos, se han excluido deliberadamente de la lista el bourbon y el whisky estadounidense, de acuerdo con las peticiones de varios países productores como Francia e Italia.
Trump quiere que Europa compre energía de EE.UU.
Trump sugirió a la Unión Europea que compre a su país energía por un valor de 350.000 millones de dólares si quieren una reducción arancelaria.
En una comparecencia en el Despacho Oval en Washington junto al presidente israelí, Benjamin Netanyahu, Trump fue preguntado por los periodistas asistentes al acto si le parecía suficiente la oferta de la Unión Europea de reducir a cero los aranceles a los bienes de equipo y automóviles procedentes de Estados Unidos.
«No, no lo es», respondió el presidente estadounidense. «Tenemos un déficit con la Unión Europea de 350.000 millones de dólares y va a desaparecer rápidamente», declaró Trump.

«Una de las maneras en que puede desaparecer fácil y rápidamente es que nos compren nuestra energía… si pueden comprarla, podemos reducir los 350.000 millones de dólares en una semana. Tienen que comprar y comprometerse a comprar una cantidad similar de energía», subrayó.
El mandatario republicano defendió la capacidad de producción energética que tiene su país, en todos los sectores, y su disposición a venderla a la Unión Europea y a otros países para compensar el déficit comercial que sufre EE.UU.
Insistió además en la idea de que la Unión Europea fue creada para hacer daño a su país y ahora debe compensar a Estados Unidos.
Europa compraría gas a Estados Unidos
La Comisión Europea señaló que está dispuesta a «negociar» la compra de más gas estadounidense como ha sugerido Trump para reducir los aranceles impuestos, si bien el Ejecutivo comunitario precisó que no es Bruselas quien discute y firma esos contratos, sino las propias empresas.
«La mitad de nuestro gas natural licuado (GNL) ya viene de Estados Unidos y estamos dispuestos a ir más allá, a trabajar con la Administración de Donald Trump, estamos dispuestos a negociar con EE.UU.», dijo en rueda de prensa la portavoz comunitaria de energía, Anna-Kaisa Itkonen.

No obstante, la portavoz subrayó que el Ejecutivo comunitario «como tal, no es un actor de mercado«.
«Nosotros no negociamos ninguno de estos contratos. Lo que podemos hacer concretamente es revisar los procedimientos de certificación de la infraestructura de GNL y mirar opciones para agregar demanda«, añadió la portavoz, quien dijo que la Comisión no tiene acceso a esos contratos privados, por lo que no puede saber con exactitud cuánto paga la UE a EE.UU. por su gas.
La Unión Europea compró en Estados Unidos el 16,1 % del petróleo que consumió durante el pasado año y el 45,3 % del gas natural licuado importado en la UE, seguido de Rusia (17,5 %) y Noruega (13,5 %), país este último que fue también el origen del 45,6 % del gas en estado gaseoso que llegó a la Unión Europea.
La portavoz de energía de la Comisión agregó que la UE negocia con distintos socios porque busca diversificar sus proveedores para reemplazar el gas natural licuado ruso.
«No queremos ser demasiado dependientes de un solo suministrador, hemos aprendido las lecciones. En todo caso, Estados Unidos sigue siendo un socio importante mientras diversificamos nuestras fuentes de energía y estamos dispuestos a discutir y negociar», concluyó.
El doble enfoque europeo
Los funcionarios de la Unión Europea están adoptando un enfoque bipartito ante la guerra comercial del presidente Donald Trump y han ofrecido reducir manera drástica los aranceles sobre automóviles y productos industriales, incluso cuando al mismo tiempo se preparan para tomar represalias inminentes con gravámenes de amplio alcance.
Funcionarios de la Unión Europea distribuyeron el lunes por la noche en Bruselas una lista de productos a los que planean aplicar aranceles de represalia, dijo Olof Gill, portavoz de comercio de la Comisión Europea, el poder ejecutivo del bloque.
Finlandia y Suecia piden que se aplique el acuerdo UE/Mercosur
En este contexto de crecientes tensiones comerciales, Finlandia y Suecia piden que se intensifiquen los esfuerzos para promover el libre comercio.
Las ministras de Asuntos Exteriores finlandesa y sueca, Elina Valtonen y Maria Malmer Stenergard, pidieron el martes 8 de abril que se abran nuevos canales comerciales y se firmen acuerdos con otras regiones del mundo. “También debemos aplicar plenamente el acuerdo de libre comercio con Mercosur, que acaba de negociarse”, añadió la ministra finlandesa Elina Valtonen, a pesar de las reticencias de varios Estados miembros, en particular Francia.
Muchas voces, sobre todo entre los agricultores europeos, se alzan para denunciar lo que se considera competencia desleal, debido a unas normas medioambientales y sanitarias menos estrictas en los países del Mercosur.
Francia, a través de su ministra de Agricultura, Annie Genevard, ha afirmado que este acuerdo “no es un remedio” para los problemas causados por la política comercial de la administración Trump. “Mercosur era malo ayer, y en mi opinión sigue siendo malo hoy para los sectores agrícolas y agroalimentarios que son vitales para nuestro país”, ha declarado la ministra en Radio J.
Francia busca una minoría de bloqueo dentro de la Unión Europea.