Cumplida una semana del inicio previsto por Javier Milei para las sesiones extraordinarias, el oficialismo por el momento no tiene confirmadas las fechas en las que buscará acelerar con los debates en comisión en Diputados, la Cámara en la que arrancarán los tratamientos de la reforma del sistema electoral y el proyecto de Ficha Limpia. Una muestra del escenario cuesta arriba para el Gobierno con esas iniciativas y también con los pliegos de Ariel Lijo y Manuel García-Mansilla, en este caso en el Senado.
Martín Menem, titular de la Cámara de Diputados, convocará para este martes a una reunión con los jefes de bloques aliados y de la llamada oposición dialoguista, con el propósito de repasar los proyectos y puntear los votos antes de avanzar con el llamado a la discusión en las comisiones.
Luego del encuentro con referentes del PRO y la UCR en la Casa Rosada, la intención del oficialismo será ampliar la negociación al resto de las bancadas: Encuentro Federal, Innovación, los sanjuaninos y un neuquino, entre otros diputados. “Vamos a tratar de que estén la mayor cantidad de bloques posibles”, adelantaron desde La Libertad Avanza.
En caso de que las conversaciones prosperen, el Gobierno procurará apurar los debates en comisión y armar una primera sesión el jueves 6 del próximo mes. Los tiempos de la convocatoria a extraordinarias -del 20 de enero al 21 de febrero- generan apremio en el oficialismo, y más allá de ese marco formal la discusión no podrá demorarse tanto por tratarse de reformas vinculadas al proceso electoral de este año.
En una entrevista con Clarín, Miguel Pichetto -titular de Encuentro Federal- fue crítico del proyecto de Ficha Limpia y aseguró que la eliminación de las PASO abrió diferentes posiciones en ese espacio. “Es un tema que va a dividir aguas y probablemente decidamos dar libertad de voto”, admitió.
Otros legisladores de bloques provinciales, como los que responden al misionero Carlos Rovira, tampoco avalarían la iniciativa que impediría ser candidatos a los condenados confirmados en segunda instancia con el argumento de no darles a los jueces federales un mayor poder con la atribución de influir en la definición de las listas.
Con ese panorama, incluso desde bloques aliados consideraron improbable la aprobación del proyecto. “Sin el bloque de Pichetto y los provinciales se hace difícil. Te quedan el oficialismo, nosotros, parte de los radicales y algunos más, no llegás a 100 votos”, hizo cálculos un diputado del PRO. En el Senado el escenario para Ficha Limpia sería todavía más complicado.
Francos y Victoria Villarruel, con los senadores opositores en el Senado.Con las PASO, también según la estimación de los aliados, al Gobierno le quedaría la alternativa de ir por la suspensión en lugar de la eliminación. De ese modo podría sumar más apoyos, aunque falta conocer la postura del peronismo. Por el momento el bloque de Unión por la Patria corcovea entre los que votarían la eliminación (ligados a mandatarios provinciales, confiados en que serán favorecidos en el armado de las listas) y los que las defienden, sin que Cristina Kirchner baje una línea concreta.
Al panorama incierto por las divisiones internas en cada espacio y el inicio del año electoral, desde algunos sectores también advirtieron que el discurso de Milei en Davos podría impactar de manera negativa en la actividad parlamentaria, en especial si el Gobierno avanza con la intención de eliminar la ley de cupos y el agravante por femicidio del Código Penal. “Trae más quilombo”, evaluó un referente del PRO, a la espera de que decanten las negociaciones clave de esta semana.
Como contó Clarín, en el Senado la intención del oficialismo será convocar a una sesión el 19 o 20 de febrero para tratar los proyectos aprobados en Diputados, la llamada Ley Antimafia y las postulaciones para la Corte Suprema, aunque el kirchnerismo mantiene su posición de no avalar los pliegos de Lijo y García-Mansilla si el Gobierno no accede a negociar la ampliación del máximo Tribunal y otros cargos como el Procurador.
