TEHERÁN.- Más de 50 personas murieron y 20 resultaron heridas en una explosión causada por una fuga de gas en una mina de carbón en el este de Irán, en uno de los peores desastres mineros en la historia del país. Aún quedaban personas desaparecidas horas después de la explosión.
El accidente tuvo lugar el sábado por la tarde en una mina en Tabas, a unos 540 kilómetros al sureste de la capital, debido a una fuga de metano que provocó una explosión en dos bloques de la mina, donde se encontraban 69 trabajadores. Se cree que algunas personas podría seguir atrapadas en el interior en túneles a una profundidad de 700 metros.
Este domingo por la mañana, recorrieron imágenes de los mineros de pie llorando junto a las camionetas que retiraban los cuerpos de sus compañeros, todos cubiertos de polvo de carbón.
Sobrevivientes entrevistados por la televisora estatal, aún cubiertos de hollín, describieron escenas de caos tras la explosión. “Estábamos en la mina, trabajando. De pronto salió humo (…) entonces noté que tenía problemas para respirar”, dijo un minero que no fue identificado por la televisora estatal. “Salté del taller y busqué hasta encontrar un lugar (seguro). Mis amigos (se quedaron) allí”.
Las autoridades atribuyeron la explosión a una fuga de gas metano. Ese gas es común en la minería, aunque las medidas de seguridad modernas emplean ventilación y otros sistemas para proteger a los trabajadores. En un primer momento no estaba claro qué medidas de seguridad empleaba la compañía privada Mandanjoo Co., que operaba la mina Tabas Parvadeh 5. No fue posible contactar con la firma el domingo para pedir comentarios.
Javad Ghenaat, gobernador de la provincia de Jorasán del Sur, donde se encuentra la mina, declaró a la televisión estatal que los equipos de emergencia estaban tratando de rescatar a varias personas atrapadas.
El guía supremo, el ayatolá Ali Jamenei, expresó sus condolencias a las familias de las víctimas tras este “triste incidente”, y pidió a las autoridades “hacer todo lo posible para salvar” a los mineros atrapados, según un mensaje publicado por la Agencia de Noticias de la República Islámica (IRNA).
El ministro del Interior, Eskandar Momeni, que viajó al lugar, precisó a la televisión que la operación de salvataje “podría durar hasta mañana”, lunes.
La televisión estatal difundió imágenes de ambulancias y helicópteros transportando a los heridos a hospitales de la zona. Otras imágenes publicadas en línea por IRNA muestran los cuerpos de algunas de las víctimas, vestidas con sus uniformes de trabajo, siendo evacuadas del lugar.
Antes de partir a Nueva York, donde asistirá a la Asamblea General de Naciones Unidas, el presidente iraní, Masud Pezeshkian, ordenó una investigación del accidente. ”Desgraciadamente, nos hemos enterado de que se produjo un accidente en una de las minas de carbón de Tabas y varios de nuestros compatriotas perdieron la vida. Ofrezco mis condolencias a sus familias”, declaró Pezeshkian.
Pezeshkian, indicó que se hicieran todos los esfuerzos para rescatar a las personas atrapadas y ayudar a sus familias. “Hablé con los ministros de salud, interior y seguridad y ordené que se resolvieran con rapidez los asuntos de las familias de las víctimas y los heridos”, dijo Pezeshkian, según un comunicado de su oficina. “También solicité que se tomen medidas para evitar la repetición de estos incidentes mejorando los estándares de trabajo en las minas del país”, agregó.
El vicepresidente primero, Mohammad Reza Aref, se reunió por su parte con los miembros del gabinete para garantizar un “seguimiento de urgencia” y un apoyo a las víctimas y sus familias, según IRNA.
Las operaciones de búsqueda son complicadas por “la acumulación de gas en la mina”, explicó el fiscal local, Ali Nesaei. ”Actualmente, nuestra prioridad es ayudar a los heridos y liberar a las personas atrapadas bajo los escombros”, declaró.”La negligencia y la culpa de agentes implicados se abordarán más adelante”, añadió el fiscal.
Irán, país rico en minerales, tiene alrededor de 1500 millones de toneladas de reservas probadas de carbón, según los medios estatales. La mina de Tabas cubre un área de más de 30.000 kilómetros cuadrados y contiene enormes reservas de carbón de coque y carbón térmico, de acuerdo con IRNA.
La industria minera iraní sufrió desastres en el pasado. El año pasado, una explosión en una mina de carbón en Damghan, en el norte, causó la muerte de seis personas, también probablemente como consecuencia de una fuga de gas.
Una explosión en una mina de carbón en 2017 mató al menos a 42 personas. El entonces presidente, Hassan Rouhani, que estaba en campaña antes de ser reelegido, visitó el lugar en la provincia norteña de Golestan y mineros enojados rodearon la camioneta en la que viajaba, pateando y golpeando el vehículo blindado.
En 2013, 11 trabajadores murieron en dos incidentes distintos. En 2009, 20 mineros murieron en distintos incidentes. A menudo se han atribuido las muertes a las laxas medidas de seguridad y la insuficiencia de los servicios de emergencias en las zonas mineras.
Agencias AFP y AP
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