Un miércoles al mediodía, la Escuela Técnica Boero se convirtió en el set de una película… de terror escolar. ¿La amenaza? Una supuesta bomba anunciada por teléfono que duró “lo suficiente como para que un profesor se quede sin peinado”.
Resulta que dos alumnos, Ricardo Joaquín Barassi y Juan Paulo Ferreyra Castro, pensaron que sería divertido marcar el 911 con el celular de la mamá de uno, pretendiendo que era el guionista de una comedia. Tres llamadas después, el curso estaba evacuando como si se filmara el final de Duro de Matar.
El operativo policial y de bomberos costó alrededor de $4 millones de pesos. Lo que ellos imaginaban que sería un “chiste piola” ahora queda en la cuenta como “probation millonaria”. Cada uno deberá pagar dos millones en seis cuotas, cumplir 24 horas de tareas comunitarias ¡y hasta asistir a un curso de concientización sobre explosivos dictado por Bomberos! Sí, escuchaste bien: aprendiendo que bromas así no son chiste.
Uno de los chicos, de 18 años, ya fue detenido y espera enfrentar cargos por intimidación pública. El otro, de 15, ¡no corrió la misma suerte al ser menor! Todo un alivio… para él ##acción insuficiente de geolocalización##
Mientras tanto, fuentes señalan que parte del “reto viral” incluía grabar el caos para TikTok o Instagram y hasta cobrar por vistas. Nada mejor para un contenido viral que una evacuación masiva, ¿no?
Moraleja para sumar a Instagram:
“¿Querés fama rápida? Probá con TikTok, no con el 911.”