CÓRDOBA.- Para la campaña 2025/26 los arrendamientos agrícolas en esta provincia rondarán los 12 quintales de soja por hectárea, medio quintal más que en las últimas dos e igual que en 2022/23. Los datos se desprenden de un relevamiento de la Bolsa de Cereales de Córdoba, que agrega que el costo promedio será de unos US$338 por hectárea, en esta moneda el segundo más bajo de los últimos seis períodos y US$27 por debajo del último ciclo.
Al considerar la inflación para la próxima campaña se registraría un aumento de US$23 por hectárea respecto de la anterior. Ese número está muy por debajo del ciclo 2022/23, cuando fue de US$575 por hectárea a precios actuales. La Bolsa advierte que para realizar los cálculos se tomó como referencia mayo 2026, llevando todos los valores de la serie al mismo poder adquisitivo de ese mes.
Gonzalo Agusto, economista de la Bolsa de Cereales, subraya que el análisis más lógico es en quintales por hectárea que es el parámetro que se usa para medir otros costos. “Con ese esquema la suba es relativa, aunque el arrendamiento queda entre los más altos. En la campaña 2011/2012 era de 11,5 quintales por hectárea y por todas las políticas que atacaron al sector -la brecha cambiaria y el deterioro del precio de la soja se sumaron a las retenciones- ese costo bajó hasta el 2016. Transparentó la situación de un sector castigado. Con las medidas que se tomaron en la gestión de (Mauricio) Macri se recompusieron los valores”.
Para Agusto, la baja de las retenciones que opera desde este mes, no tendrá un efecto inmediato en los arrendamientos. “En un contexto de precios bajos, es una ayuda, puede tener algo de impacto más adelante, pero menor. Si se eliminaran los derechos de exportación sería otra cosa, porque haría más atractivo el sector y habría más competencia por las tierras, aumentando su precio”.
El estudio calcula, por las respuestas de las encuestas, que 23% de los pagos se realizan de manera semestral, seguida por la forma trimestral con 21% del global y, en tercer lugar, el mensual con 17%. Con 11% se posiciona la modalidad pago a cosecha, mientras que 10% elige pagar la mitad a la siembra y el resto a cosecha. Seis por ciento escoge el tipo de retribución anual. La categoría “otros”, 14%, incluye pagos del tipo adelantado, cuatrimestral, a disposición del arrendador y a porcentaje, entre otros
En el análisis por departamento de la provincia de Córdoba, ocho registran un incremento en sus arrendamientos, cuatro marcan bajas y cinco se mantienen iguales. Calamuchita, con una suba de 10%, es el que más subió; Río Seco cayó 5,6%.
Los arrendamientos más altos son los de la zona sudeste de la provincia, Marcos Juárez con 18,5 quintales de soja por hectárea y Unión, con 16. Les siguen Juárez Celman con 12,5 quintales y General San Martín, Colón y Juárez Celman, con 12 quintales. En la otra punta, quedan Río Seco y Tulumba, con 8,5 y 9,5 quintales por hectárea, respectivamente.
En cuanto a la dispersión de datos, Unión presenta la mayor variabilidad, con una diferencia de ocho quintales por hectárea, siendo 12 quintales por hectárea el mínimo arrendamiento y 20 el máximo. En la actual campaña, el valor promedio se mantiene en 11,5 quintales de soja por hectárea, cifra que se repite por tercer ciclo consecutivo.