Harold Mayne Nicholls (63) fue el presidente de la ANFP (Asociación Nacional de Fútbol Profesional) y quien convenció a Marcelo Bielsa de hacerse cargo del seleccionado de fútbol de Chile en la primera década del tercer milenio. El exdirigente deportivo y periodista anunció en las últimas horas que se postulará para ser presidente de su país en las elecciones de noviembre próximo.
«Hoy oficialicé el inicio de la recolección de firmas para mi candidatura», dijo Mayne Nicholls en un video publicado en la red social X este martes cerca de las 19. En el mismo, contó que inscribió ante el Servicio Electoral de Chile la búsqueda de firmas para confirmar la candidatura. Su objetivo, «devolverle el alma a Chile», según sus palabras al cerrar la pieza audiovisual.
En las Eliminatorias para Alemania 2006, la selección trasandina terminó séptima bajo la conducción de Juvenal Olmos y Nelson Acosta. Y ni siquiera pudo acceder al repechaje. José Abdalah vio en ese momento cómo su ciclo al frente del ente rector del fútbol chileno llegaba a su fin.
El 15 de enero de 2007 fue Mayne Nicholls quien lo reemplazó tras su gestión en Universidad Católica, uno de los tres grandes del fútbol trasandino. El 10 de agosto de ese año, cuando Chile tampoco hizo pie en la Copa América de Venezuela, la ANFP y Mayne Nicholls confirmaron que, tras arduas negociaciones, Bielsa había aceptado tomar el mando de La Roja.
«Chifladus habemus», tituló un diario de aquel país. La prensa, más que imaginar qué clase de equipo formaría, puso el foco en sus exigencias y «locuras».
Las crónicas reportaban por entonces que exigió «estricta privacidad para él y su familia; nadie puede saber dónde vivirá en Chile y, mucho menos, conocer su número telefónico».
Hoy oficialicé el inicio de la recolección de firmas para mi candidatura presidencial desde la Plaza de Copiapó.
Si crees que otra forma de hacer política es posible, firma con tu Clave Única en https://t.co/bRNygIgQq7.
¡Devolvámosle el alma a 🇨🇱!#Harold2026 #HaroldPresidente pic.twitter.com/mzwtIR9Ijf— HaroldMayne-Nicholls (@MayneNicholls) April 1, 2025
Que, además, pidió que «la lista de convocados será de pura y exclusiva responsabilidad del técnico; en los viajes toda la delegación lo hará en clase ejecutiva o en avión privado. Los hoteles de concentración deberán ser de cinco estrellas».
«El campo de entrenamiento deberá ser de primer nivel. La fecha de los amistosos serán a sugerencia del técnico. Los deberes y derechos de los jugadores quedarán establecidos en la primer reunión del plantel. No puede haber ningún atraso en el pago de premios y sueldos ni de cuerpo técnico ni de jugadores», completaban el listado de requisitos a los que Mayne Nicholls accedió.
Bielsa debutó en Eliminatorias al frente de Chile el 13 de octubre de 2007, curiosamente en la cancha de River contra el seleccionado de Alfio Basile, la tarde que Juan Román Riquelme volvía a jugar tras una larga inactividad en el Villarreal de España por una pelea con el chileno Manuel Pellegrini.
El 10 argentino marcó dos goles de tiro libre en un partido marcado por el morbo, ya que el Loco volvía a un escenario junto a la celeste y blanca tras renunciar al cargo en agosto de 2004. Fue el día de «me quedé sin energías», consecuencia de la traumática eliminación en primera ronda en Corea-Japón 2002 que ni siquiera logró apagar la medalla dorada en Atenas 2004.
Además, en otro cruce nombres y hechos que vinculaban a los protagonistas de esa tarde, Riquelme le anotaba al entrenador que lo privó de ser mundialista en uno de los mejores momentos de su carrera vistiendo la camiseta de Boca. En el Monumental, para donde se mirara había un motivo de tensión.
Camino a Sudáfrica 2010, la Chile de Bielsa ganó 10, empató 3 y perdió 5 partidos, lo que le significó terminar segunda detrás de Brasil. Mayne Nicholls había encontrado al hombre que le devolvió el alma al seleccionado chileno. Lo llevó cómodamente al Mundial y en tierras africanas hizo transpirar a España, que luego alzaría la copa, y cayó en octavos de final contra Brasil.

Mayne Nicholls, gracias a su gestión, se convirtió en un importante dirigente de la FIFA, pero en la ANFP su lugar pasaría a ser ocupado por el empresario español Jorge Segovia, ganador de elecciones en la entidad. Aquella situación desató una crisis que desembocó en que primero Bielsa decida no continuar en el cargo. Sin el hombre que lo había llevado, la opción de pasar a trabajar con una nueva directiva que no era de su agrado sentenció su decisión de irse.
La agencia EFE, en marzo de 2011, reportó que Mayne Nicholls contó que fue el propio Bielsa quien dejó entrever que los nuevos jefes de la federación no hicieron «todo lo posible para retenerlo».
Bielsa se fue del seleccionado chileno y Sergio Jadué, que terminó en el cargo luego de que Segovia quedara inhabilitado por una denuncia sobre conflicto de intereses, acudió a Claudio Borghi. La Roja recuperaría el alma y conocería la senda del triunfo tiempo después con Jorge Sampaoli, quien para Argentina fue lo diametralmente opuesto.

Mayne Nicholls fue parte importante de CIES, el brazo educativo de la FIFA y creó una fundación llamada «Ganamos Todos», a través de la cual brindaba ayuda con el fútbol como herramienta de inclusión.
Además, fue uno de los enviados por FIFA para monitorear a Qatar como candidata a organizar el Mundial 2022. El chileno le bajó el pulgar por las altas temperaturas en Doha entre junio y julio. Su salida del máximo ente del fútbol no tardaría en llegar y el dirigente se alejó de las luces del fútbol.
Independiente y outsider: así quiere competir Mayne Nichols por la presidencia de Chile
En declaraciones a Radio ADN, el pasado 26 de marzo, dijo: «Tendré una independencia política, donde espero que todos puedan venir a cooperar y engrandecer al país». Primero deberá conseguir 135 mil firmas.

Allí también explicó: «Tuve contacto con 11 o 12 partidos políticos, yo mismo los busqué básicamente porque creo en el diálogo. Al final, yo nunca he pertenecido a ningún partido político, nunca he estado involucrado en nada, entonces creo que lo lógico es mantener esa independencia».
Tal vez el último cruce entre política y fútbol que tuvo al precandidato presidencial chileno como protagonista fue cuando invitó a Bielsa a la Casa de la Moneda, junto al resto del plantel. Allí los recibiría el entonces presidente Sebastián Piñera. Bielsa le negó el saludo y a Mayne Nicholls eso no le gustó.
El entrenador diría al despedirse del cargo: «Sé positivamente que soy yo quien pierde al irse».
En su salto de la Católica al Complejo Deportivo Juan Pinto Durán, encontró el «loco» que lo acompañara. En caso de llegar a la Casa de la Moneda, buscará «otro Bielsa» que le devuelva el alma a Chile.