TOLEDO.- Un hombre fue detenido este lunes por el asesinato a puñaladas de un niño de 10 años en una cancha de fútbol en Toledo. El único sospechoso por el crimen habría ingresado este domingo al predio polideportivo Ángel Tardío, ubicado en la localidad española de Mocejón, en donde un grupo de niños jugaba un partido, y comenzó a agredirlos con un “objeto punzante”.
Según informó el medio local ABC, el presunto criminal tiene 20 años, era vecino de la pequeña localidad española y, tal como expresó su padre, tiene una discapacidad intelectual del 70%. Pese a que aún no hubo ningún tipo de pericia oficial, el hombre explicó que su hijo tiene una “incapacidad que se considera grave”, y vive junto a su madre y su hermano.
El mismo diario detalló que el detenido confesó parte del crimen a los agentes de Homicidios de la Comandancia de Toledo, y aseguró que “vivió el ataque como si lo estuviera protagonizando otra persona”. Sin embargo, aún no explicó si la agresión tuvo algún tipo de motivación ni si conocía previamente a la víctima o al resto de los niños.
Tras el arresto y los allanamientos realizados en la vivienda del sospechoso, las autoridades todavía no encontraron el arma con la que se cometió el crimen, pero sí se llevaron otras evidencias, como una computadora y una consola de videojuegos.
Por su parte, la Unidad de la Policía Judicial de la Guardia Civil y el Grupo de Información de la Comandancia de Toledo desplegaron un operativo con una decena de patrullas ese mismo día para detener al autor del crimen, que finalmente fue capturado. Tras el arresto, el Juzgado Número 3 de Toledo, en funciones de guardia, decretó el secreto de sumario sobre el caso, según confirmaron fuentes de la Delegación del Gobierno.
Producto del ataque, un menor identificado como Mateo sufrió graves heridas y murió de un paro cardiorrespiratorio pocos minutos después de que los servicios de emergencia arribaran al lugar.
Los vecinos del lugar aseguraron a la prensa que el campo estaba cerrado por ser domingo -por lo que no había ningún responsable que controlara la situación- y que los niños se habrían metido a la fuerza a través de un cerco roto, por el que también habría ingresado el asesino.
Agencia Europa Press
LA NACION