Pepe habla de su experiencia y ahí desliza qué es lo que piensa

El balotaje presidencial de Uruguay se definió mucho más temprano que lo anunciado por las encuestadoras, Yamandú Orsi (57) se convirtió en presidente electo. Su primera actividad del lunes fue la visita al ex presidente José «Pepe» Mujica (89), su mentor, en la chacra de Rincón del Cerro, en las afueras de Montevideo.

En la noche el Frente Amplio (FA) ganó el balotaje más holgado de lo que preveían las encuestas. Con el 100% de las mesas escrutadas por la Corte Electoral de Uruguay, Orsi logró el 49,84% de los votos y el oficialista Álvaro Delgado (55), candidato del Partido Nacional (blancos) y de la Coalición Republicana, obtuvo el 45,87%.

Orsi se define como un «pragmático progresista», una definición que explicó ante Clarín, como: «De izquierda, progresista, heredero del progresismo nacional pero pasé por un tamiz de 20 años de gestión». Pero además de su pragmatismo, está la gestualidad. Y decidió visitar a Mujica, que por no sentirse bien de salud no fue a los festejos del Frente Amplio en la rambla.

Desde las 8 de la mañana, los móviles de televisión se plantaron en la calle de ripio donde está la entrada a la chacra en la que vive el ex presidente del Frente Amplio y líder del Movimiento de Participación Popular (MPP), en el que está enrolado Orsi. En principio estaba previsto para el mediodía, pero el encuentro tuvo lugar a las 16.

Una pequeña valla interrumpía el tránsito y obligaba a frenar donde está el container que usan de oficina los custodios del expresidente que tiene por ley. Más allá del sol sobre la seguridad, en general se filtran las visitas que llegan hasta el lugar sin cita.

La casa del ex presidente aparece en los mapas de Google como «Chacra de José Mujica» y eso suele atraer visitantes inesperados. «Una vez bajó un ómnibus de Buquebus repleto de chinos. Vieron la dirección y en un inglés rústico le dijeron al chofer que pare. Empezaron a bajar chinos, sacaban fotos, no entendíamos nada», le contó a Clarín Lucía Topolansky (80) esta semana.

Desde el entorno del expresidente contaron a este diario que el matrimonio Mujica-Topolansky está «muy feliz» con el resultado electoral. Convaleciente de un cáncer de esófago, Mujica participó de algunas actividades de campaña y había definido la elección como clave.

«Me habló de su experiencia, de lo que le pasó a él, de cómo era esto y cómo tenía que firmar, más que nada eso. muy cuidadoso de eso. (…) El Pepe habla de su experiencia y ahí desliza qué es lo que piensa pero en ese sentido tiene la sabiduría de no plantearte las cosas como consejos sino de plantearte cuál fue su experiencia, cómo él armó, cómo es la presidencia, alguna cosa que ya habíamos hablado», aseguró Orsi en una rueda de prensa de la que participó Clarín.

«Siempre tenés algo para llevarte, algunas cosas las tenés que apuntar porque son esas frases que te sirven mucho», agregó Orsi.

A las 22 del domingo se desató una fiesta del Frente Amplio en Plaza España, con la rambla como escenario, pero la lluvia desconcentró a la multitud temprano y el ganador volvió a Salinas, la localidad a una hora de Montevideo en el departamento de Canelones a festejar en familia.

Orsi reveló porqué no estuvo Mujica en los festejos. «Que se quedó con ganas pero era una noche muy complicada desde el clima, mucho calor y decidió pero está como fiera enjaulada en campaña electoral», remarcó el presidente electo.

Al igual que su mentor, Orsi adelantó que vivirá en su casa de Salinas, sobre una calle de tierra y a dos cuadras del Río de la Plata.

Para este lunes a la tarde se esperaba que se de el primer encuentro de la transición entre Yamandú Orsi y Luis Lacalle Pou (51), pero después Orsi reveló que sería martes o miércoles. El traspaso de mando será el 1 de marzo, pero el propio Lacalle Pou puso énfasis en la reunión de este lunes.

Cuando todavía no se sabía el ganador, Lacalle Pou aseveró: «El lunes empieza a haber una transición, con lo cual naturalmente empieza a haber una especie de compartir las decisiones, no las diarias, no las coyunturales, pero sí lo que viene para adelante».

Y minutos antes de las 21.30 del domingo, lo confirmó: «Llamé a Yamandú Orsi para felicitarlo como Presidente electo de nuestro país y para ponerme a las órdenes y empezar la transición apenas lo entienda pertinente».

Orsi aseguró que pasadas las 11 de la mañana lo llamó el presidente de Brasil Lula da Silva y que espera reunirse con él y con Javier Milei los primeros días de diciembre en Montevideo.

«En diciembre hay una oportunidad, van a venir varios (presidentes) a la cumbre del Mercosur y el propio presidente Lacalle Pou me planteó que su idea es que lo acompañe. Ojalá se pueda dar el vínculo con Milei», sostuvo a Orsi ante los periodistas que fueron hasta su casa en Salinas.

En campaña electoral, Yamandú Orsi solo había adelantado a un integrante de su posible y ahora futuro gabinete: el ministro de Economía.

El nombre elegido fue el de Gabriel Oddone (61), un hombre del establishment. Ante la consulta de Clarín sobre si fue una designación para el mundo económico, Orsi respondió: «Para los mercados que miran con desconfianza a un progresista o de izquierda».

Doctor en Historia Económica por la Universidad de Barcelona y economista por la Universidad de la República (Udelar), Oddone es hijo de los reconocidos historiadores Juan Oddone y Blanca París. El año pasado debió dejar CPA/Ferrere, uno de los estudios jurídicos más importantes de Uruguay, por el reglamento interno de retirarse a los 60.

Se autodefine como neoclásico y firmó junto a 110 economistas del Frente Amplio una carta contra la estatización de las jubilaciones que promovía en el plebiscito el sector más de izquierda del mismo FA.

En una entrevista al semanario Búsqueda, Oddone dijo que cree «firmemente que los mercados son el mejor mecanismo de asignación de recursos, pero que estos tienen fallos de todo tipo y, por tanto, requieren fuertes procesos regulatorios para que la provisión de los bienes sea menos imperfecta. Es una típica mirada de un Estado potente, orientador y regulador, para dejar que la iniciativa privada, dentro de esas reglas, construya la prosperidad».

Pero se especula con el resto de las designaciones del gabinete de Orsi, especialmente por los compromisos electoras que asumió en campaña. Las conjeturas políticas a esta hora del lunes pasan por el encuentro con Mujica y que de ahí salgan nombres para el gabinete y los articuladores para una cámara de Diputados donde el FA no tendrá mayoría, como sí en el Senado.

«Mis enemigos son el narcotráfico, la delincuencia y la corrupción», sostuvo Orsi en campaña y prometió crear 2000 cargos policiales y sumar cámaras. La seguridad, a cargo del futuro ministro del Interior, será uno de los nombres claves y que generan más expectativa.

Y el otro gran tema, el mismo que propuso el ala más de izquierda del Frente Amplio será nuevamente el sistema jubilatorio. El gobierno de Lacalle Pou logró -a través del Congreso- elevar la edad jubilatoria de 60 a 65, en escalas para los nacidos después de 1977.

Este martes se reúne el secretariado ejecutivo del Frente Amplio y es probable que los primeros nombres salgan recién después de ese encuentro.

Orsi pidió una revisión: «Voy a permitir que quienes puedan jubilarse a los 60 años puedan hacerlo, y que quede claro, no vamos a derogar las AFAP (Administradora de Fondos de Ahorro Previsional), pero eso no implica que no tengamos que revisar«.

Ahora la incógnita vuelve a quedar abierta, con el déficit fiscal en la mira y un Oddone que deberá buscar los equilibrios, como lo hizo el ex ministro de Economía Danilo Astori, durante los 15 años consecutivos de gobierno del Frente Amplio entre 2005 y 2020.