En Caucete no hay premio mayor: mientras algunos sueñan con ganarse un telekino, otros andan con el bolso cargado de “sorpresitas blancas”. Así fue como Mayco Adrián Ibañez Ruarte, un caucetero de 31 años, pensó que podía ganarle al azar… pero se topó con la Policía y perdió peor que River en la Libertadores.
El muchacho llevaba 55 envoltorios de cocaína, unos 20 gramos, prolijamente fraccionados para la venta. Vamos, casi un “pack familiar” de la felicidad artificial. Cuando vio a los uniformados intentó huir, pero quedó más lento que colectivo en hora pico.
Al ser detenido, Mayco desplegó su show personal: insultos, gritos y un acting digno de casting para Gran Hermano. Ni Duki enojado con el autotune habría levantado tanto volumen.
La auxiliar fiscal Gauto, implacable como siempre, ordenó secuestrar todo el material y poner al dealer a disposición de la Justicia Federal. Los policías, mientras tanto, siguen practicando el arte de atrapar dealers de a uno, como si San Juan fuera un inmenso “Pokémon Go” pero versión narco.
En Caucete, por lo visto, la “blanca navidad” no espera a diciembre.