La llegada de Cristian Medina a Estudiantes de La Plata, luego de que el empresario Foster Gillett pagara a Boca los 15 millones de dólares de la cláusula de recisión, reavivó la polémica sobre la posible llegada de las Sociedades Anónimas Deportivas (SAD) al fútbol argentino.
Uno de los que se refirió al respecto de este tema, una vez más, fue el presidente Javier Milei, quien viene motorizando el ingreso de las SAD en la órbita de la AFA más allá de la resistencia de Claudio Chiqui Tapia y compañía.
“Estudiantes está camino a ser una SAD. Será en beneficio de sus socios e hinchas. Afortunadamente, Estudiantes tiene un presidente que no sólo ha sido un jugador de fútbol excepcional y exquisito, sino que tiene una inteligencia importante», había dicho Milei en una entrevista con radio Mitre.
Y agregó: «Verón la está viendo y está llevando el club hacia el lugar correcto. Me saco el sombrero. Demostró ser un crack adentro y afuera de la cancha”.
Sin embargo, la Brujita no tomó ese elogio como tal. “Sea el Presidente de la Nación o sea el que sea, pueden opinar y pueden decir. Hay que entender la movida y el juego. Estudiantes no va a ser una sociedad anónima. Ya lo dijimos y lo vamos a seguir diciendo», señaló en una entrevista con La Voz Albirroja, este mismo sábado.
Esta sociedad entre Estudiantes y Foster Gillett, que también acerca a Lucas Alario al Pincha, a más de uno le hizo pensar en el arribo de las SAD a La Plata. Sin embargo, Verón habló el pasado 31 de diciembre con el medio partidario Atentos Pinchas y aclaró el tema.
La Brujita quiso llevar calma a los hinchas del club que preside: «Creo que nunca le hemos fallado al hincha y siempre hemos sido claros. Las decisiones muchas veces te pueden gustar más o menos, pero creo que en estos años el club mantuvo una línea de conducción».
Tras precisar que no son «unos loquitos que llegamos ahora por necesidad y vamos a hipotecar el club», señaló que lo que se viene es «un camino de transformación del fútbol argentino porque es una necesidad. A partir de eso es donde se cimenta nuestra forma de gestión y esta transición a algo nuevo». «Está claro que todos tenemos algún prejuicio o interrogantes, nos puede generar hasta incomodidad, porque muchos creen que vamos a dejar de ser algo que no vamos a dejar de ser», añadió.
«Es algo que tenemos que transitar todos juntos. No es un cheque en blanco ni nada por el estilo. No somos improvisados», sostuvo Verón. Y amplió: «Estamos lejos de cometer locuras porque, no sé… queremos traer cinco refuerzos. Apuntamos que el club crezca no sólo desde el fútbol, sino también en lo institucional».
Verón es dirigente de Estudiantes desde 2014. Foto: EFE/ Raúl Martínez«Nos tratan de improvisados o de un desapego hacia un lugar que a nosotros nos cobija. No somos unos loquitos, es algo que venimos trabajando y estudiando y que es lo que viene para el fútbol argentino. Es algo nuevo, una hoja en blanco. En el mundo tenes sociedades anónimas, está el sistema alemán, pero lo que viene en el fútbol argentino es distinto, no tiene antecedentes y no nos queremos apurar», siguió explicando la Bruja.
Sobre Foster Gillet, Verón detalló: «Encontramos a alguien que viene a hacer un negocio, que ve un negocio como lo vemos nosotros en el fútbol». El arribo del inversor se dará recién después de una asamblea con los socios, pautada para fines de febrero o marzo, mientras Verón y compañía estudian y diagraman los detalles de ese acuerdo.
