El conflicto fintech en torno a los pagos con códigos QR retrocedió un escalón, luego de que anoche Mercado Pago revirtiera su decisión del viernes de bloquear los pagos que usuarios de la billetera Modo, su principal competidor en el segmento, intentaran realizar con tarjetas de crédito o débito Visa a través de sus códigos QR. Si bien las discusiones y negociaciones por las condiciones de funcionamiento todavía continúan, desde anoche esta funcionalidad ya volvió a estar operativa.
Se trata de un nuevo capítulo que enfrenta a la empresa de Marcos Galperin con la billetera digital desarrollada y financiada por los principales bancos de la Argentina (Galicia, Macro, Santander, BBVA, Ciudad, ICBC, HSBC, entre otros). La pelea afectaba la interoperabilidad de los códigos QR, una reglamentación del BCRA.
El viernes pasado, usuarios de la billetera Modo comenzaron a recibir una notificación que les advertía acerca del impedimento para realizar pagos usando tarjetas Visa a través de los códigos QR de Mercado Pago, la unidad de negocios financieros de Mercado Libre que impulsó el uso de esta herramienta de pagos y hoy es dueña de la mayor red de códigos QR de la Argentina.
Según esta empresa, la decisión de bloquear las operaciones con tarjetas Visa desde Modo (no alcanzaba a otras marcas o medios de pago) se debía a que había comenzado a regir un nuevo requisito de seguridad (’tokenización’ o encriptación de datos) que impuso Mercado Pago y ya había sido “informado a Modo, a los bancos involucrados y a las autoridades del BCRA hace más de un mes”.
Desde Modo, sin embargo, acusaron a su competidor de haber “deshabilitado” unilateralmente los pagos para limitar la competencia. En ese sentido, plantearon que se trataba de una medida arbitraria que violaba la normativa del BCRA sobre la interoperabilidad de los códigos QR que “interrumpe la libertad de los usuarios” para pagar con tarjetas Visa. “No corresponde que tomen de rehén a la interoperabilidad, a visa y a los usuarios para conseguir beneficios comerciales”, indicaron en la empresa.
Detrás de la decisión de Mercado Pago también se combinaron presiones de actores relevantes. Tal es el caso de Visa, que sin tener injerencia en el conflicto se vio indirectamente afectada, al bloquearse un canal de su negocio: si bien desde Modo se podían hacer pagos con Visa mediante otros QR, como los de Fiserv, Payway (Prisma) o Getnet, Mercado Pago es el principal proveedor de estos códigos en el país.
Las normas del BCRA establecen que todos los QR para hacer pagos en el país deben ser ‘interoperables’, es decir, permitir que un usuario pueda realizar pagos o transacciones con cualquier funcionalidad (dinero en cuenta, tarjetas de débito o crédito) desde cualquier billetera.
La regla, que generó una fuerte disputa durante 2023, se demoró en su implementación y finalmente entró en vigencia este año, dispone que, por ejemplo, un código de Mercado Pago acepte pagos con tarjeta desde cualquier app. Para Modo y otros competidores, se trata de un punto sensible porque, sostienen, habilita mayor competencia en el sector.
Finalmente, la decisión de Mercado Pago de revertir las restricciones que había impuesto el viernes pasado establece una tregua, mientras ambas firmas continúan las negociaciones. “Mercado Pago llegó a un entendimiento con los bancos y Modo en relación a la responsabilidad de la gestión de contracargos y fraudes en pagos con tarjeta de crédito recibidos desde otras billeteras en QR, por el período que demande el desarrollo de la tokenización de bandera Visa”, informaron desde la empresa en un comunicado, donde enfatizaron que en “mientras se avanza con los desarrollos del requisito pactado para proteger la seguridad y calidad de las transacciones, todos los pagos serán procesados con normalidad”.
Más allá del conflicto por la ‘tokenización’ de las operaciones con Visa, se mantienen las conversaciones por temas latentes, como las responsabilidades por fraude, los contracargos y las condiciones comerciales en torno a los usos de los códigos QR.
Esta nueva disputa entre Modo y Mercado Pago se generó por la decisión de esta última de implementar la ‘tokenización’ de las operaciones con Visa, un estándar de seguridad global que apunta a generar menores condiciones de fraudes o riesgos con los pagos digitales. “Los pagos de las billeteras que no cuenten con este mecanismo de seguridad podrían ser rechazados hasta que cumplan con el requisito pactado”, definió Mercado Pago en un comunicado.
Hay una norma del BCRA, publicada a fines de mayo, que se refirió a este tema y fue el eje del conflicto que hoy quedó en suspenso. Se trata de la comunicación A 8032, publicada el 30 de mayo, que indica que la “responsabilidad del fraude” ante un pago con tarjeta de crédito a través de códigos QR “será asumida por la billetera” excepto cuando el pago se realice “con requisitos y estándares técnicos de tokenización” de cada tarjeta.
“Los pagos de las billeteras que no cuenten con este mecanismo de seguridad podrían ser rechazados hasta que cumplan con el requisito pactado”, había definido Mercado Pago en un comunicado, sobre un conflicto que involucraba únicamente a las tarjetas Visa y a la billetera Modo. De hecho, otras competidoras, como Google Pay y Apple Pay no tuvieron este inconveniente y pudieron seguir operando.
Desde la perspectiva de Modo, la norma del BCRA establece quién debe hacerse cargo de la responsabilidad de los fraudes, pero no dispone condiciones sobre los requerimientos de la “tokenización” para el funcionamiento de la interoperabilidad. En otras palabras, afirmaron que aun sin usar la tokenización, los QR de Mercado Pago deberían permitir los pagos con tarjeta Visa desde su billetera.
Más allá del conflicto por la tokenización (Mercado Pago plantea que Modo aun no cuenta con esa funcionalidad técnica en su plataforma), existe una discusión de fondo en torno a las responsabilidades por fraudes generados por los pagos digitales y los ‘contracargos’ que se genera cuando, por ejemplo, usuarios realizan “desconocimiento de cargos” u operaciones ya realizadas.
Desde Modo apuntan contra Mercado Pago por su bajo nivel de control y el mecanismo “confuso y poco transparente” en el que informan a los usuarios por las operaciones (cómo se detallan en el resumen de la tarjeta).