El papa Francisco murió esta madrugada a los 88 años. Así lo anunció el cardenal estadounidense Kevin Farrell: “Queridos hermanos y hermanas, con profundo dolor, debo anunciar la muerte de nuestro santo Padre Francisco”.
Muchas personas, al recordar el papado del primer Sumo Pontífice argentino, recorren sus hitos importantes en el cargo, como por ejemplo sus encuentros con reyes del mundo. A lo largo de los años fueron muchos los monarcas que visitaron el Vaticano.
Tras la difusión de la noticia de la muerte del Papa, la casa real de Países Bajos se expresó en redes sociales al recordar la visita de la reina Máxima y el rey Guillermo al Sumo Pontífice. “Estamos profundamente afectados por la muerte de Su Santidad el Papa Francisco. Recordamos calurosamente las reuniones personales con él, entre otros durante nuestra visita de estado a la Santa Sede en 2017″, expresaron a través de la cuenta oficial de Instagram de la casa real.
En el texto, destacan la misericordia que “irradió el papa Francisco”: “A través de una sólida creencia en el amor de Dios, abogó por la compasión y la humanidad. Con una vida sobria y sencilla, siempre eligió ponerse del lado de los vulnerables y los necesitados”. La pareja real celebró la “búsqueda activa [del Papa] por la conexión con otras comunidades religiosas de todo el mundo” y destacó el trabajo de escucha y de “amor” con el que el sumo pontífice supo “ganarse los corazones de muchas personas, tanto dentro de la Iglesia católica como fuera”. El texto concluye diciendo: “Apreciamos su memoria en gratitud”.
Un dato importante es que esta había sido la primera vez que un monarca de Países Bajos en ejercicio había hecho una visita de Estado a un Papa —si, en cambio, de forma privada—. Esto se debe, centralmente, a que dicho país es principalmente protestante. Elisabetta Piqué contó para LN+ que “la visita fue de un clima muy familiar y cariñoso”, donde se hablaron algunas palabras en español y hubo una reunión a puertas cerradas, después de algunas escenas públicas.
Vale recordar que el 9 de abril el rey Carlos III de Inglaterra y Camila de Gran Bretaña se reunieron con el Papa y fueron los últimos reyes en visitarlo oficialmente. El Sumo Pontífice les deseó “los mejores deseos por el aniversario de su boda”, ya que se cumplían 20 años del hecho, y los monarcas “estaban encantados de que el papa estuviera lo suficientemente bien como para recibirlos y de haber tenido la oportunidad de compartir sus mejores deseos en persona”.
Tras la muerte de Francisco, la casa real de Reino Unido se expresó en redes sociales lamentándose del hecho. “Su santidad será recordado por su preocupación por la unidad de la Iglesia y por su incansable compromiso por las causas comunes de todas las personas de fe y todos los bienaventurados que trabajen en beneficio de otros”, comienza el texto. Luego, Carlos III explica que con su trabajo, el Papa “se preocupó por las personas y por el planeta” y que influyó positiva y profundamente en muchas vidas. El comunicado concluye describiendo al papa como un “fiel seguidor de Jesucristo”.
Otra visita emblemática fue la del rey Felipe y la reina Leticia de España. Esta reunión oficial se dio pocos días después de la asunción de la emblemática pareja al reinado español. Se trató de una visita agradable que destacaron las bromas y la vestimenta blanca de Leticia —una de las mujeres permitidas para vestir este color en presencia del Papa—, con la ausencia de mantilla, elemento protocolar tradicional que pasó a ser optativo.
El rey Felipe de Bélgica y la reina Matilde también visitaron al sumo pontífice en 2023. La reina pudo vestirse de blanco, al ser una de las mujeres privilegiadas que pueden hacerlo, según el protocolo. “Durante las cordiales conversaciones en la Secretaría de Estado, se expresó satisfacción por las buenas relaciones entre la Santa Sede y Bélgica, destacando el papel de la fe cristiana y la Iglesia católica. Luego se abordaron cuestiones de interés común y algunos problemas de carácter internacional, con especial referencia a África y la guerra en Ucrania, así como el compromiso por la paz entre los pueblos”, informó en su momento la Oficina de Prensa de la Santa Sede.
Una visita notable también fue la de la reina Isabel II y su esposo en 2014. La reunión oficial duró poco más de quince minutos. Ambos intercambiaron regalos y algunas ideas a puertas cerradas.
