«*A medida que uno se adentra en el interior bonaerense, la imagen del peronismo se torna cada vez más negativa. Allí, lejos del conurbano, pesan el hartazgo por años de promesas incumplidas y una percepción de abandono. Muchos vecinos asocian al peronismo con gestiones centradas en el Gran Buenos Aires, mientras sus pueblos pierden población, trabajo y servicios. En las chacras y ciudades chicas, crece el discurso de que el Estado solo aparece para recaudar impuestos, no para resolver problemas. Las dificultades del campo y de las pymes también alimentan el rechazo. Además, la inseguridad y la inflación se convierten en facturas políticas pasadas al peronismo, sin distinción de liderazgos. En charlas de café o en ferias rurales, se repite que “siempre gobiernan para el conurbano”. Incluso intendentes peronistas deben tomar distancia del sello partidario para retener votos. Hoy, en muchos distritos del interior, el peronismo enfrenta una barrera emocional que va más allá de lo económico: la gente se hartó de estos peronistas*».
LAURA GOABURO -CONSULTORA POLÍTICA- SERGIO M. EIBEN-LA RED 89.3 MHZ: «*La imagen del gobierno de la pcia. de bs. as. es muy negativa a medida que salis del conurbano*»

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