Sin escándalos: No está involucrada en causas como «Valijagate» o el caso cripto “$LIBRA”, mientras Milei enfrenta cuestionamientos de transparencia.
Clave en seguridad social: Su mensaje fuerte (“un jubilado no puede esperar y un discapacitado menos”) la posiciona como defensora de los más vulnerables.
Control del Senado: Como presidenta del Senado, controla la agenda legislativa y uso del recinto.
Tiene respaldo popular: Mantiene imagen positiva y capacidad de tracción electoral independiente.
Agenda propia fuerte: Realiza actividades provinciales y circuitos independientes del Ejecutivo.
Activa en DD.HH. y memoria: Lidera CELTYV y defiende visiones revisionistas sobre terrorismo en los setenta.
Uso austero de recursos: Se diferencia criticando gastos en viajes y SIDE, y usa aviones de línea.
Relación presidencial en crisis: Su distanciamiento de Milei la proyecta como figura con perfil propio.
Influencia en fiscalizaciones: Impulsa auditorías en planes sociales y estructuras del Senado.
Potencial para 2027: Se especula que necesita mantenerse en su puesto para preparar una candidatura propia.