Con la familia real gravemente enferma de cáncer y bajo tratamiento, el Reino Unido aceptó dos visitas de Estado este año. Una de ellas es geopolíticamente muy importante: la visita del Emir de Qatar y su primera esposa, formado en los colegios militares británicos. A Gran Bretaña le interesa el rol de Qatar en la mediación de la liberación de los rehenes en Gaza y los negocios británicos en los Emiratos.
El rey Carlos III y Kate, la princesa de Gales, abandonaron su convalescencia y estuvieron en la recepción, en el paseo por el Mall, en las carrozas doradas. Pero hubo una notoria ausente: la reina Camilla, de baja por enfermedad.
Camilla lleva semanas sin actividades, después de su viaje a Australia y Samoa, de donde regresó oficialmente “con un problema en los pulmones”. Este martes no estuvo en la recepción ni el besamanos pero sí en el almuerzo. Dijo a sus invitados que su infección en el pecho era “una forma de neumonía”, que la obligaba a permanecer en reposo y aislada.
No asistió al Festival del Recuerdo de la Legión Real Británica ni al servicio del Día del Recuerdo en el Cenotafio, sino que celebró la ocasión «en privado, en casa».
Sin embargo, sí organizó una recepción del Premio Booker en Clarence House, a mediados de noviembre, donde le dijo al autor Percival Everett: «Creo que me estoy recuperando. Pero estas cosas siempre requieren un poco de tiempo para deshacerse de ellas».
Camilla sufre fatiga posviral. No participa em la mayoría de las actividades al aire libre de la visita de dos días de los emires de Qatar para evitar que afecte sus pulmones. Ha sido una gran fumadora. Los médicos le pidieran que se tomara más tiempo para recuperarse.
La Reina se perdió la bienvenida ceremonial en un frío desfile de guardias a caballo el martes.
El evento se llevó a cabo al aire libre en Horse Guards Parade, en el centro de Londres, donde el rey y el príncipe y la princesa de Gales se unieron al Emir de Qatar y su esposa.
La visita de estado de Qatar es la primera de Kate como parte de su regreso gradual a las funciones públicas, desde que le diagnosticaron cáncer.
La princesa se reunió con el jeque Tamim bin Hamad al Thani y su esposa, la sheika Jawaher bint Hamad bin Suhaim al Thani. Los acompañó al patio de armas para reunirse con el rey y las altas figuras del gobierno que la esperaban.
Sin embargo, Kate no tenía previsto asistir al banquete de Estado por la noche, al que sí iría su marido William.
Carruajes en el Mall de Londres, donde el rey Carlos III recibió este martes al emir de Qatar. Foto: REUTERS La reina, protegida
En cambio, Camilla llegó al Palacio de Buckingham poco antes, sonriendo mientras bajaba de su automóvil en la Gran Entrada. Se dirigió al cálido ambiente del palacio. La condición de la neumonía de Camilla era viral, no bacteriana, y ya no tiene el virus.
Contrajo la enfermedad después de un largo viaje a Australia y Samoa. Desde entonces, ha cancelado una serie de compromisos, entre ellos la Royal Variety Performance, el estreno de Gladiator II y el servicio del Día del Recuerdo en el Cenotafio.No ha ido al hospital a ser tratada.
La princesa de Gales se unió a otros miembros de la realeza en esta visita. Estaba vestida de color bordeaux junto al príncipe William, su marido.
Una fuente real dijo que la reina necesita flexibilidad porque algunos días está «en muy buena forma» y dejó de toser. Pero todavía tiene «episodios de cansancio extremo». Su equipo médico le ha aconsejado que se tome cada día como venga.
Se unió al rey, al príncipe y a la princesa de Gales y al emir para una foto de grupo antes del banquete, que tendría lugar más tarde. Pero se tomaría un breve descanso antes de la cena mientras comenzaban a llegar los invitados.
Los visitantes reales fueron recibidos oficialmente en Whitehall por el Rey, antes de que el emir pasara revista a la guardia de honor del 1.er Batallón de Guardias Galeses en el Desfile de Guardias a Caballo.
El príncipe y la princesa de Gales habían seguido la tradición. Se unieron al Jeque Tamim bin Hamad Al Thani y a la primera de sus tres esposas, Sheikha Jawaher, en su viaje desde su residencia privada a Whitehall.
El Emir de Qatar y su esposa están en el Reino Unido para una visita de Estado de dos días y este martes a la noche se organizó una comida de gala en el palacio de Buckingham.