La primera ministra de Italia, Giorgia Meloni, de 47 años, visitó al Papa en el hospital Gemelli donde está internado y al salir dijo que lo encontró “receptivo” y que no ha perdido “su proberbial sentido del humor”.
Agregó que “estoy muy contenta de haberlo encontrado atento y receptivo” y “hemos bromeado como siempre”. Dijo que le había trasmitido sus deseos de recuperación “en nombre de todo el gobierno italiano y de toda la nación”.
El Papa Francesco fue internado el viernes por sus problemas respiratorios que resultó una bronquitis complicada con una infección polimicrobiológica derivada en una neumonía bilateral.
Las condiciones clínicas del Santo Padre se presentan estacionarias. Los análisis de sangre, evaluados por el personal médico, muestran una ligera mejoría, en particular en los índices inflamatorios», informó el boletín difundido por la Sala de prensa vaticana.
Los médicos informaron que pasó la noche bien, que durmió tranquilamente, y que “respira en forma autónoma”.
Esta mañana tras el desayuno se sentó en un sillón y leyó los diarios que le llegaron sus ayudantes.
Los médicos destacaron esta mañana que “su corazón está soportando bien” los tratamientos y respira sin ayuda de oxígeno.
La de la premier Meloni es la primera visita que se conoce fuera del grupo de clérigos que lo asisten. El Papa sigue encaminando durante todo el día los problemas de gestión de su pontificado.
Como ha ocurrido las otras veces que estuvo internado en el décimo piso del hospital Gemelli en la suita reservada a los pontífices, los niños y sus familiares del vecino departamento de oncología pediátrica que se encuentra en el mismo piso le han hecho llegar cartas y dibujos.