Acompañado por funcionarios de Infraestructura, Hidráulica, OSSE, el Ministerio de Familia y el intendente Matías Espejo, Orrego recorrió las localidades de Huaco, Gran China y Mercedes, donde la crecida superó las defensas existentes y afectó viviendas e infraestructura.
“Las defensas eran escuetas y no resistieron, por lo que el agua avanzó sobre el pueblo. Ahora estamos trabajando en la contención y en la ayuda a los vecinos”, explicó el gobernador. También mencionó que se están abordando problemas sanitarios en un barrio de 40 familias, donde se requerirá la intervención de camiones atmosféricos una vez que el agua drene.
El Gobierno dispuso maquinaria, camiones cisterna con agua potable, colchones, frazadas y otros elementos esenciales para los afectados. Además, ya se planifican obras hídricas a largo plazo para evitar que situaciones similares se repitan. “Cada río tiene características diferentes y necesitamos soluciones adaptadas. En algunos sectores, el cemento no es viable y se requieren otras técnicas como el uso de piedra”, detalló Orrego.