El jueves pasado, el Centro CÃvico tuvo su momento de pelÃcula de acción cuando una llamada alertó sobre un supuesto artefacto explosivo. Spoiler: no habÃa nada, salvo un montón de empleados felices de salir temprano.
La policÃa investigó y, sorpresa, descubrió que hacer llamadas amenazantes desde tu propio teléfono NO es la mejor estrategia para el crimen perfecto. Tras un trabajo impecable de análisis, los agentes lograron identificar a los sospechosos, quienes, aparentemente, pensaban que las tarjetas SIM son como máscaras de superhéroes: las usás y nadie te reconoce.
Resultado: allanamientos en Rawson y Pocito, dos detenidos y tres celulares requisados, que seguramente ahora están aprendiendo lo que es el «modo avión permanente».
Fuentes cercanas afirman que los responsables podrÃan enfrentar un juicio, y que su próxima llamada será para pedir un abogado… desde un teléfono público.