Franco Colapinto aprovecha sus «mini-vacaciones» en Madrid para salir a cenar con amigos y amigas, pero también para seguir construyendo su carrera como piloto de Fórmula 1. Es por eso que el argentino estuvo como invitado de lujo en el programa El Hormiguero, un clásico de la TV de España que se transmite por Antena 3 y tiene como conductor a Pablo Motos.
El argentino de 21 años que irrumpió en la Fórmula 1 de la mano de James Vowles, el jefe de equipo de Williams, y consiguió sorprender al mundo con sus primeras tres presentaciones -12° puesto en Monza, 8° y cuatro puntos en Bakú y 11° en Singapur- se mostró distendido, como es habitual, y contó cómo fueron sus inicios, el viaje a Italia a los 14 años para vivir en una fábrica de chásis de kartings y cómo lograba sobrevivir: «Sabía cortar frutas, pero no sabía cocinar. Me hacía arroz todos los días en una pava eléctrica», dijo.
Por otro lado, bromeó con el dinero que cobra como piloto de Fórmula 1: «Estoy un poco pobre», dijo. Y aclaró que para estar en la Máxima es muy importante «la pasta», como le llaman al dinero vulgarmente en España. Eso le dio pie para contar cómo es su relación con Bizarrap, el productor musical argentino, que le dio una «mano enorme» para poder conseguir sponsors y poder sentarse en el FW46 de Williams Racing.