La insólita reacción originada en el gobierno de Gabriel Boric por la denuncia de un tuitero chileno que contó que aviones de las fuerzas armadas de su país despegaron ante una «alerta» por una supuesta «violación» del espacio aéreo trasandino por parte de aeronaves argentinas refleja una vez más la sensibilidad bilateral con asuntos territoriales, militares y diplomáticos.
La ministra de Defensa chilena, Maya Fernández, y luego la ministra del interior, Carolina Toha, aseguraron que las fuerzas armadas chilenas habían reaccionado por una alerta que indicaba que hubo una incursión no identificaba en su espacio aéreo.
Frente a eso, la Fuerza Aérea Argentina, consultada por Clarín, afirmó no sólo que ningún avión de su flota hizo una incursión aérea sobre Chile, y que tampoco podría haberla hecho porque a esa hora no tiene aviones que vuelen sobre la zona. Fuentes castrenses no oficiales indicaron que a esa hora, las 20 del martes, la incursión podría haber sido de un mismo Twin Otter de las fuerzas chilenas o un Typhoon británico que suele hacer incursiones entre Chile y las Malvinas.
«Ayer, cerca de las 20 horas, en la zona oriental del estrecho Magallanes, existió una alerta de tráfico aéreo no identificado, ante lo cual nuestra Fuerza Aérea de Chile activó los protocolos, despegando los aviones F-5 con el resguardo de nuestra Fuerza Aérea. Posterior a eso, se perdió el contacto con este tráfico aéreo y en este momento se está llevando adelante una investigación que es lo que corresponde decir, y para tranquilidad de toda la ciudadanía, es que la Fuerza Aérea activó los protocolos y defendió nuestra frontera y soberanía como corresponde,» dijo la ministra Fernández, nieta del ex presidente Salvador Allende.
En campaña por una banca en el Senado, la funcionaria tomó los diferendos con Argentina como una cuestión propia, inclusive en lo referente a la Antártida y la plataforma continental. Por otra parte, fuentes consultadas en el país trasandino afirmaron que el gobierno de Boric podría estar intentando desviar la atención del golpe que siente por el caso del abogado Luis Hermosilla, imputado por una serie de delitos en el «Caso Audios» y que salpica tanto a políticos como a miembros de la Corte Suprema y policías locales, sin contar el malestar creciente por la ola de inseguridad en Chile.
Aunque la ministra no mencionó directamente a la Argentina, es decir, no dijo que los aviones que supuestamente habrían entrado al espacio aéreo chileno era de este país, en algunos sectores diplomáticos locales consideraron sus declaraciones como «incendiarias».
La situación es paradójica si se tiene en cuenta que la ministra Fernández hizo estas declaraciones sin hablar con el jefe del Estado Mayor Conjunto de la Argentina, Xavier Isaac, durante un ejercicio reciente junto a la comandante general Laura Richardson del Comando Sur de la Flota de los Estados Unidos en preparación de la Conferencia de Defensa Sudamericana #SOUTHDEC24 organizada por Chile. Argentina, Estados Unidos y Chile están haciendo en este momento dos ejercicios militares conjuntos, uno en el norte del país vecino, otro el Unitas, en el Pacífico.
Por otra parte, en Cancillería y en Defensa, afirman que tampoco recibieron reclamo alguno. Todo subió de tono tras el Tuite de Quezada y la declaración de la ministra Fernández.
Más tarde, fue la ministra Toha quien habló de «Investigación en curso y contactos con Argentina», que aquí niegan sobre un «tráfico aéreo no identificado» en el Estrecho de Magallanes. «Se detectó el movimiento de una nave, no se sabe exactamente qué elemento, se actuó de acuerdo a los protocolos, un avión nuestro de la Fuerza Aérea fue a identificarlo, se perdió el contacto porque probablemente esa persona, o esa nave se alejó de nuestro espacio aéreo», sostuvo.
Entre tanto Boric, le dijo a un periodista de Biobío Chile – se desconoce sin buscando bajarle el tono al tema- «después te cuento sobre eso, pero me llegó un informe recién».
«Confirmado. Medios aéreos desplegados por la FACH desde la base aérea Chabunco de Punta Arenas en misión de intercepción real hacia la frontera con Argentina: aviones F5, twin Otter, helicóptero Bell 412», escribió el tuitero @cesar_quezada, que suele tener información militar y otras contra Argentina.
El propio tuitero afirmó horas después, cuando el ministerio de Defensa chileno ya había estipulado una posibilidad de error que era «importante que el @mindefchile complete la investigación ya que llegó a Falklands (así llama a las Malvinas) el RFA Lyme Bay(L3007) de Reino Unido, si no fueron aviones argentinos podría haber sido un drone de última generación de UK que no fue captado por ningún radar argentino y si por Chile.»
Desde Argentina, la actitud fue por completo diferente. De indiferencia más bien, como cuando hasta el presidente Gabriel Boric intimó a los argentinos a mover unos paneles solares que habían sido puestos por error dos metros adentro del territorio chileno en la zona más austral de Tierra del Fuego. El episodio había sido fruto de una mala señalización, pero por responsabilidad de las autoridades de los dos países en la región. Ya fue solucionado.
Mientras que desde el Gobierno de Javier Milei evitan caer en peleas con Boric, por razones estratégicas, la Fuera Aérea Argentina insistió en su versión. El único vuelo que hicieron ese día fue un LADE, Twin Otter que voló por la Aero vía y bajo control de Comodoro Rivadavia
El único movimiento detectado de LADE fue entre las 15.35 y las 16.55. En este momento no hay aviones en Argentina -y los «enemigos» lo saben afirman acá- que esté en condiciones de volar en la noche en la zona que los chilenos reclaman.