La realización del Tour del Sol vuelve a generar un profundo malestar entre los usuarios de las l´´ineas de colectivos, quienes se ven obligados a enfrentar cambios de ruta y demoras interminables a causa del evento. Una comunicación clara por parte de las autoridades debe llegar a los miles de ciudadanos que quieren llegar cuanto antes a su casa. Algunas manifestaciones escuchadas con anterioridad, «¿A quién le importa nuestra rutina?”, expresó indignada una conductora, atrapada en una parada de omnibus en Santa Lucia.
Las rutas alternativas propuestas generan confusión entre los usuarios. Los organizadores se hablan –y con razón– de la relevancia del evento, los ciudadanos afectados exigen una respuesta contundente: ¿por qué siempre deben ser ellos los perjudicados? Una vez más, el amado ciclismo en nuestra provincia deja a su paso no solo competidores veloces, sino descontentos porque s