El primer ministro británico Keir Starmer reafirma la soberanía británica sobre las Islas Malvinas y Gibraltar, descartando cualquier negociación. La entrega de las Islas Chagos a Mauricio generó preocupaciones sobre otros territorios de ultramar, pero el gobierno asegura que la soberanía de las Malvinas sigue intacta. La gobernadora de las Islas Malvinas, Alison Blake, también garantiza el compromiso del Reino Unido con la soberanía del territorio del Atlántico Sur.