El proyecto propone que los conductores menores de 65 años puedan renovar su licencia cada 10 años. ¡SÃ, 10 años! Eso es más tiempo del que algunos pasaron en el gimnasio, y con suerte, más tiempo del que un ciudadano promedio pasa recordando si pagó la cuota del seguro del auto. Los mayores de 66 años tendrán un «tratamiento especial», con licencias renovables cada 5 años, y los abuelitos de 76 o más, se conformarán con una licencia renovable cada 3 años… o cada vez que se acuerden de ir a hacer el trámite.
Y la joya de la corona: ¡la renovación online! Porque, ¿quién necesita hacer fila cuando puedes estar en tu casa, en pijama, renovando la licencia como si fueras un experto en tecnologÃa? Claro, solo si no necesitas los exámenes médicos… que, entre nosotros, para algunos, pueden ser una versión menos divertida de “¿Quién quiere ser Colapinto?».

