“En un tiempo de crecientes desafíos globales, esta conferencia se centrará en la importancia de un gobierno limitado, el capitalismo de libre mercado, la responsabilidad individual y la preservación del patrimonio cultural y religioso”, reza el anuncio de la versión argentina de la Conferencia Política de Acción Conservadora, la CPAC, que por primera vez se hará en el país este miércoles 4 con entradas a un valor desde 100 a 5.000 dólares.
A días de cumplir el año de gobierno, Javier Milei es la cereza del encuentro y será quien cierre la actividad que tendrá lugar en el hotel Hilton desde primera hora del miércoles. Mientras que para los conservadores estadounidenses, la CPAC con Milei ayuda a la expansión de sus ideas en Latinoamérica, para los libertarios, es la usina de lo que llaman su “batalla cultural” contra el socialismo, el comunismo, y contra el progresismo en las ideas, el “wokismo” que, aseguran, domina y destruye los organismos multilaterales.
Desde la primera hora estarán en los paneles como expositores figuras como Lara Trump, la nuera de Donald Trump, el presidente electo de Estados Unidos; los Bolsonaro, Jair y Eduardo; y Santiago Abascal, líder del partido Vox, de España. También participarán Ron Paul, fundador del movimiento libertario de los Estados Unidos, y Ben Shairo, un conocido analista conservador.
Además acudirán los ministros Luis Caputo (Economía) y Patricia Bullrich (Seguridad) y atracciones locales como Daniel Parisini, que tuitea como «Gordo Dan».
Lara Trump, es la esposa de Eric, el menor de los tres hijos que tuvo el presidente electo de los Estados Unidos con Ivana Trump (los otros dos son Donald Jr. e Ivanka). Entrenadora personal, y presentadora de tevé se convirtió en una figura central de la campaña de su suegro que, agradecido, siempre la colocó en un lugar visual destacado. Hoy preside el Comité Nacional Republicano.
CPAC es en Latinoamérica la versión liberal, y ultraliberal y conservadora de lo que para la izquierda son el Foro de San Pablo y su sucesor, el agónico Grupo de Puebla.
Es a través de la CPAC que Milei se acercó Donald Trump en febrero de 2024, apenas dos meses despues de asumir la Presidencia. Entonces viajó a Maryland y le declaró -en los escasos minutos que pudo ver al líder republicano- que quería volver a verlo en noviembre, lo que enojó muchísimo a la administración demócrata de Joe Biden. Pero así se cumplió.
«Milei es el John Lennon de los libertarios», dijo recientemente la CEO de CPAC, Soledad Cedro, sobre la figura el libertario que a mediados de año no asistió a la cumbre del Mercosur en Asunción de Paraguay para dar el presente, en cambio, en la conferencia conservadora de Camboriú, en Brasil. Fue organizada por el movimiento afín a los Bolsonaro. El otro latinoamericano «mimado» por el movimiento es el salvadoreño Nayib Bukele.
Este miércoles Jair Bolsonaro estaría impedido de viajar a la Argentina y saldría por zoom, porque debido a sus causas judiciales tiene el pasaporte retenido. En cambio, se espera la llegada de Eduardo Bolsonaro, diputado y la figura mas activa en redes de los tres hijos del ex presidente. Amigo de Milei, quiere que el gobierno argentino refugie a los prófugos acusados por el intento de golpe a Lula da Silva que huyeron a la Argentina.
Argentina, «faro» de la batalla de Milei
A mediados de noviembre Milei también tuvo su momento en la CPAC de Mar a Lago, Florida, el paralelo donde vive Trump. Gracias a su amistad con el dueño de Space, Tesla y X, Elon Musk, fue invitado a hablar en el mismo evento que Donald Trump.
Los organizadores tuvieron para con Milei un duro gesto porque le cortaron el micrófono cuando el presidente argentino aún no había terminado. Pero el Presidente consiguió su foto especial con Trump, lo que marca nuevos tiempos en la relación con Estados Unidos. Fue el primer mandatario que visitó al magnate empresario republicano, tras ser electo, el 5 de noviembre pasado.
En su discurso reciente, Milei llamó a crear una alianza de países occidentales. Dijo que en esa alianza deberían estar «los Estados Unidos liderando en el norte, la Argentina en el sur, Italia en la vieja Europa, e Israel, el centinela en la frontera de Oriente Medio.
Para Milei, Occidente está amenazado por «la hegemonía cultural de la izquierda, que intoxica a la gran mayoría de las instituciones». Y dijo que los que creen “en la libertad” debían unirse “para hacerle frente a esta barbarie”.
Para este foro, el Presidente dispuso que algunos de los divulgadores de este mensaje hablen en la CPAC, como Agustín Romo, presidente del bloque de la Libertad Avanza en la provincia de Buenos Aires; el Secretario de “Culto y Civilización” de la Cancillería y Parisini/Dan.
También aparecen figuras internacionales como Pablo Viana, el diputado uruguayo que le presentó a la despedida canciller Diana Mondino, al diplomático Eduardo Bustamante, quien continúa como vice del ministro Gerardo Werthein. Hablarán al principio dos íconos de la CPAC, Matt y Mercy Schlapp
La CPAC Argentina se sostiene en la batalla cultural del presidente que tiene al menos tres ONGs que le dan sustento, al también llamado “brazo armado” de la Libertad Avanza y una profunda simbiosis entre todos: el Frente Joven, presidido por el Subsecretario de Culto, Agustín Caulo; el Global Center for Human Rights, presidido por Sebastián Schuff; y la nueva Fundación Faro Argentina, presidida por Agustín Laje, que curiosamente no está entre los panelistas de esta CPAC.
Estas tres ONGs tienen los siguientes puntos en común: comparten la ideología de un fuerte nacionalismo ultracatólico contrario a la agenda 2030, en especial el aborto y lo que consideran “la ideología de género”, y una ideología liberal, como lo fueron los militares nacionalistas católicos en la década del 30.
Tambien hacen un fuerte énfasis en la soberanía estatal contraria al “gobierno supranacional” de los organismos internacionales, también llamado “gobierno global socialista”. Y hacen una fuerte defensa de los discursos duros -con insultos incluidos- a través de las redes sociales con lo que consideran el “derecho absoluto” a la libertad de expresión, de manera que son contrarios a criminalizar las acciones en redes sociales del ejército de trolls que difunden el mensaje del Gobierno.
Llaman a la Argentina como “Faro del Mundo”, que consiste en promover los valores históricos de la cultura argentina librando la “batalla cultural”. De ahí el nombre de la nueva Secretaría de Culto y “Civilización”, cuyo titular es Sotelo y que forma parte de la estructura de la Cancillería Argentina
Sus discursos traen reminiscencias a la revista de extrema derecha nacionalista católica “Cabildo”.
Las tres ONGs asesoran al Gobierno en temas de política exterior y se felicitan mutuamente en las redes sociales, y son seguidos y apoyados por Sotelo y la abogada de Cancillería Úrsula Basset.
El problema, ya han advertido internamente, es que las organizaciones internacionales han sido utilizadas como herramienta de colonización ideológica al enfocar sus esfuerzos únicamente en países arraigados en valores cristianos.