“El Papa ha vuelto”, gritan y cantan los peregrinos que ha millares siguen llegando a Roma para celebrar el Jubileo del Año Santo 2025. El encuentro de este miércoles en la Casa de Santa Marta, donde se aloja, con los reyes británicos ayuda a la imagen que Francisco intentará completar en los días de Pascua.
La foto junto al rey Carlos III y Camilla se difundió este jueves poco antes de que el Santo Padre visitara de sorpresa la Basílica de San Pedro.
Ya se avecina el Domingo de Ramos y se tejen las conjeturas. El Vaticano avisó que el pontífice dará la bendición “urbi et orbi” (a Roma y al mundo) el domingo 20, día de Pascua. Los peregrinos esperan encontrarlo en alguna de las ceremonias. El entusiasmo va “in crescendo”.
Aunque a Francisco le restan seis semanas en reposo absoluto que le impusieron sus médicos y tuvieron razón, como demuestra la recuperación del Ilustre enfermo, los peligros no han pasado y no han faltado las preocupaciones. En su aparición del domingo último en la plaza de San Pedro el Papa despertó gran entusiasmo y aceptó las manos que le tendían algunos fieles, mientras otros lo tocaban y se acercaban demasiado a él.
Este riesgo de contagio no debería repetirse según los médicos, porque es peligroso. Francisco aun tiene la infección de la neumonía bilateral (en los dos pulmones) aunque está lentamente disminuyendo.
El Vaticano no anuncia programas inmediatos. No se sabe si presidirá la misa da del Domingo de Ramos, dentro de cuatro días.
Los médicos prefieren que no se fatigue demasiado, ni que afronte los vientos de la plaza de San Pedro. Podría llover, según los pronósticos, o el contacto con los fieles. En el Papa crece el deseo de normalidad y de salir con prudencia del aislamiento, pero los médicos le recuerdan que aceptó los dos meses de reposo absoluto como premisa y garantía de su retorno pleno al gobierno de la Iglesia.
El Papa ya ocupa una buena parte de sus jordanas en los problemas de la Iglesia. Un asunto que conoce bien es el de la disolución del Sodalicio de Vida Cristiana, un potente grupo católico ultraconservador con sede en Perú, que el pontífice disolvió el 14 de enero debido a una cadena de abusos y pedofilia, con un estilo sectario.
El diario español El País, que ha seguido con información detallada las historias en torno al movimiento, señala que el Movimiento de Vida cristiana buscaría ganar tiempo para sacar el mayor número posible de bienes de las cajas de la organización.
El sacerdote Jaime Baert, expulsado por Francisco en octubre de 2024, sería la mente principal del imperio económico.
“Il Messaggero” de Roma señala que “como ninguno ha todavía firmado los actos de disolución, la institución resulta aún activa, aunque dos institutos de la rama femenina han acordado la clausura”.
El objetivo sería “limpiar” económicamente las finanzas porque una vez que el Sodalicio sea disuelto, todos sus bienes irán al Vaticano.
En enero el Movimiento peruano admitió haber pagado a 83 víctimas de abusos y de haber invertido 5,3 millones de euros a título de indemnización. La riqueza del Sodalicio está estimada en 912 millones de euros en Perú.