DAMASCO.- Tras las masacres de civiles alauitas que avivaron los traumas de la guerra civil, el presidente interino sirio, Ahmed al-Sharaa, firmó este jueves una Constitución temporal que regirá como guía legal durante un período de transición de cinco años, bajo dominio islamista.
Entre los llamados de dentro y fuera del país a crear una Siria inclusiva, tras 14 años de guerra civil, Al-Sharaa dijo que esta declaración constitucional quiere marcar el inicio de “una nueva historia” para el país, “en la que se reemplaza la opresión por la justicia”.
Los gobernantes interinos de la nación han luchado por ejercer su autoridad en gran parte de Siria desde que el grupo insurgente islamista, Hayat Tahrir al-Sham (HTS), lideró un movimiento insurgente relámpago que derrocó en diciembre pasado al presidente Bashar al-Assad.
Exlíder de HTS, Al-Sharaa es ahora oficialmente el presidente interino del país, una decisión que se anunció tras una reunión de los grupos armados que participaron en la ofensiva contra Al-Assad.
Si bien muchos sirios se alegraron de ver el fin del régimen dictatorial de la familia Al-Assad, que duró más de 50 años en ese país, devastado por la guerra, las minorías religiosas y étnicas se mostraron escépticas respecto a los nuevos líderes islamistas y reacias a permitir que Damasco, bajo sus nuevas autoridades, adquiera el control de sus áreas.
Abdulhamid al-Awak, uno de los siete miembros de la comisión nombrada por Al-Sharaa para redactar la Constitución provisional, dijo el jueves, en una conferencia de prensa, que se mantendrían algunas disposiciones del documento anterior, como la estipulación de que el jefe de estado debe ser musulmán y que la ley islámica es la principal fuente de jurisprudencia. El documento dispone también una “absoluta separación de poderes”, dijo Al-Awak.
Pero Al-Awak, experto en derecho constitucional que enseña en la Universidad Mardin Artuklu de Turquía, también dijo que la Constitución temporal incluye disposiciones que consagran la libertad de expresión y de los medios.
La Constitución “logrará un equilibrio entre la seguridad social y la libertad” en la inestable situación política de Siria, afirmó. La declaración consagra “los derechos sociales, políticos y económicos” de las mujeres, destacó.
Se formará una nueva comisión para redactar una Constitución permanente, pero no se sabe si será más incluyente con los grupos políticos, religiosos y étnicos de Siria.
Al-Sharaa alcanzó el lunes un pacto histórico con las autoridades kurdas, respaldadas por Estados Unidos, en el nordeste de Siria, que incluye un alto el fuego y la fusión de sus fuerzas armadas con las agencias de seguridad del gobierno central.
El acuerdo se produjo después de que las fuerzas gubernamentales y los grupos aliados aplastaran un levantamiento iniciado la semana pasada por hombres armados leales a Al-Assad. Grupos de derechos humanos afirman que cientos de civiles, en su mayoría de la secta minoritaria alauita a la que pertenece Al-Assad, fueron asesinados en la contraofensiva en ataques de represalia emprendidos por distintas facciones.
Un objetivo clave de la Constitución interina era establecer un cronograma para la transición política del país. En diciembre, Al-Sharaa dijo que podría tomar hasta tres años reescribir la Constitución de Siria y hasta cinco años organizar y celebrar elecciones.
Al-Sharaa nombró una comisión para redactar la nueva Constitución después de que Siria celebrara una conferencia de diálogo nacional el mes pasado, en la que se hizo un llamado a anunciar una Carta Magna temporal y a llevar a cabo una elección parlamentaria interina. Los críticos afirmaron que, en la conferencia, organizada apresuradamente, no se incluyeron a los diferentes grupos étnicos y sectarios de Siria ni de la sociedad civil.
Estados Unidos y Europa han sido reacios a levantar las duras sanciones impuestas a Siria durante el gobierno de Al-Assad hasta que estén convencidos de que los nuevos líderes crearán un sistema político inclusivo y protegerán a las minorías. Al-Sharaa y los gobiernos regionales los han instado a reconsiderar, temiendo que la economía en ruinas del país pueda traer más inestabilidad.
También este jueves, un ataque aéreo israelí alcanzó un edificio de departamentos en un suburbio de la capital. Hubo tres personas heridas, una de ellas de gravedad, según los medios estatales de Siria y un grupo de paramédicos.
El Ejército israelí afirmó que el ataque aéreo realizado en el suburbio de Dummar, en Damasco, estaba dirigido a lo que calificó como un centro de mando del grupo insurgente Yihad Islámica Palestina.
El Ejército afirmó que el centro de mando se había utilizado para dirigir ataques contra Israel y prometió “responder con fuerza” a la presencia de grupos armados palestinos dentro de Siria.
El ministro de Defensa israelí, Israel Katz, dijo en un comunicado que “cada vez que se organice actividad terrorista contra Israel”, Al-Sharaa “encontrará aviones de combate sobrevolando y atacando objetivos terroristas”.
Un miembro de Jihad Islámica Palestina que estaba en el lugar del ataque aéreo en Siria dijo a la agencia AP que el departamento atacado era el hogar del líder del grupo, Ziad Nakhaleh. Ismail Sindak dijo que el departamento había estado vacío durante años, y añadió que Nakhaleh no está en Siria. Cuando se le preguntó si alguien había muerto en el ataque, Sindak respondió que “la vivienda estaba vacía”.
Agencias AP y AFP
