La Cámara de Diputados dio media sanción y giró al Senado la Ley de Financiamiento de Universidades Nacionales, con 143 votos afirmativos, 77 negativos y 1 abstención. Luego de rechazar el dictamen que había impulsado el kirchnerismo, el segundo dictamen de minoría impulsado por la UCR fue aprobado con algunas modificaciones.
La sesión maratónica había arrancado sobre el mediodía del miércoles, luego de que los radicales lograran incluir en el temario su proyecto de financiamiento universitario, una propuesta que es resistida por la Casa Rosada, ya que tiene un impacto fiscal de $ 1,4 billones, lo que hace tocar el objetivo de déficit cero de Javier Milei.
Votación en general de la Ley de Financiamiento de Universidades Nacionales.Después de 17 horas de sesión, a las 4.30 empezó a debatirse el proyecto para financiar a las universidades, que atraviesan una delicada situación económica que se vio reflejada el pasado 23 de abril en la Marcha Nacional Universitaria para reclamar por la urgente recomposición de las partidas para gastos de funcionamiento y pago de salarios.
El diputado por el bloque del Frente de Izquierda Nicolás del Caño criticó al oficialismo por mostrarse en contra del proyecto. «Para los 100 millones de dólares que le van a destinar a la SIDE para hacer todo tipo de operación, no hay ningún tipo de preocupación, pero para este proyecto la preocupación es tremenda», ironizó.
«Para esto no dicen absolutamente nada. A través de un decreto, le dan llave en mano para hacer espionaje. Nosotros marcamos que la partida presupuestaria tenía que incluir el aumento del salario a docentes y no docentes de las universidades», agregó.
En ese sentido, planteó que «hay un atraso salarial enorme, y eso tiene que ver con un ataque y una postura ideológica del gobierno de Javier Milei que es en contra de las universidades públicas».
A su turno, la diputada radical Danya Tavela apuntó que «un docente universitario, titular de cátedra, con exclusividad y un doctorado, cobra lo mismo que un jefe de despacho de cualquier diputado». Y reclamó: «Les están faltando el respeto a los docentes universitarios al no convocarlos a la paritaria».
La diputada kirchnerista por Entre Ríos Blanca Osuna (UxP) y miembro informante alertó que «las universidades están en un punto crítico» y consideró que el financiamiento de las universidades «es un derecho constitucional».
Desde el lado del oficialismo, el diputado José Luis Espert aseguró que el gobierno de Javier Milei «está solucionando varios problemas en materia de educación superior heredados del gobierno de Alberto Fernández».
Y advirtió: «No podemos permitirnos una ley de fantasía como la que existe en el dictamen de mayoría que vaya en contra del déficit cero, porque es el instrumento para mantener a raya a la inflación».
La votación: dos rechazos y una aprobación
Con 126 votos negativos y 90 afirmativos, Diputados rechazó el dictamen de mayoría propuesta por el bloque de Unión por la Patria.
El proyecto incluía la actualización bimestral de las partidas presupuestarias, incorporaba ítems adicionales con un costo fiscal mayor, como la ampliación de beneficiarios y montos de las becas Progresar. También obligaba explícitamente a la recomposición salarial de docentes y no docentes universitarios.
Con 86 votos afirmativos y 130 negativos, también fue rechazado el primer dictamen de minoría. Resta por votar el segundo dictamen de minoría, propuesto por el bloque de la Unión Cívica Radical.
Finalmente, con 143 votos afirmativos y 77 negativos, fue aprobado en general el segundo dictamen de minoría propuesto por el bloque de la Unión Cívica Radical y que lleva las firmas de Encuentro Federal, Coalición Cívica e Innovación Federal.
El dictamen sugiere una actualización del presupuesto basada en la inflación del año pasado, medida por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC), y una indexación bimestral usando un coeficiente que combine un 50% de variación del Índice de Precios al Consumidor (IPC), 25% de la variación del dólar y otro 25% de las tarifas de servicios públicos.
También propone una recomposición salarial para docentes y no docentes con base en el IPC, pero de manera subsidiaria a la paritaria colectiva.
El único artículo que fue rechazado está vinculado con la distribución de los fondos. La propuesta del radicalismo establecía que el aporte del Estado nacional para las universidad se distribuirá en función del número de estudiantes ingresantes y alumnos en cada institución, el tipo de carrera ofrecida.
Ahora, la propuesta pasará al Senado, donde el radicalismo deberá contar con el apoyo del kirchnerismo y de los bloques provinciales para avanzar con la sanción definitiva.