Cómo se quebró Karina Milei, que se entrena para la pelea con Cristina Kirchner

Karina Elizabeth Milei tenía todo preparado: el discurso impreso y el Parque Lezama repleto. Había ensayado para dar su primer discurso en un acto de La Libertad Avanza, la fuerza política que lidera su hermano Javier. Observó al público enfervorizado y a su familia mezclada entre los concurrentes. Y se quebró.

«El Jefe», como la bautizó el hoy Presidente de la Nación, no había dejado detalle librado al azar para su gran debut político. Había sido «coacheada» y había practicado varias veces la entonación y dónde poner énfasis, levantando la voz en los párrafos más potentes, algo habitual en las filas libertarias donde el griterío abunda. Pero vio la plaza colmada y se quedó sin voz.

La hermana presidencial salió de todos modos a escena y durante poco más de 10 minutos leyó el discurso donde dejó en claro que será, una vez más, «El Jefe» de todos en la fuerza oficialista. No solo en el armado de las listas de todo el país, sino también en el escenario. Han abundado las fotos con ella, como la que documentaron Patricia Bullrich y Diego Valenzuela (otrora macristas) para unificar bloques en la Legislatura bonaerense, en un movimiento craneado por Sebastián Pareja, el operador karinista que se anima hasta a discutir con el poderoso Santiago Caputo.

Ahora, Karina volverá a mostrarse en Santiago del Estero, estrenando la presidencia nacional del partido libertario, y encabezará una reunión con los referentes de esa provincia. Allí manda Tomás Figueroa, un santiagueño pura casta que supo estar en tierras kirchneristas en el Senado de la Nación y cuyo acercamiento habría sido de la mano de Eduardo «Lule» Menem. A Santiago del Estero, donde dará un nuevo discurso, Karina irá con Martín Menem, quien junto a su primo «Lule» participan del armado político de los Milei.

La hoy secretaria General de Presidencia será actriz principal de la pelea electoral por venir en la provincia de Buenos Aires al igual que Cristina Elisabet Kirchner. En el Gobierno nacional creen hoy que la ex Presidenta será candidata en la elección del año próximo. Las recientes apariciones de CFK -como la de este martes en La Matanza- dan forma a un armado que entusiasma a la Casa Rosada: la pelea Karina versus Cristina.

En la administración nacional de Javier Gerardo Milei hay ductos con el Instituto Patria. Las apariciones de Cristina Kirchner son prolijamente replicadas por la cuenta del Presidente. Luis «Toto» Caputo polemiza con Mayra Mendoza, la favorita de CFK, en redes sociales y todos quedan contentos. La discusión contribuye a la polarización, algo que la propia gestión de Mauricio Macri realizó en su momento para confrontar con el kirchnerismo. La historia se repite.

Pero los números no son perfectos para el Gobierno. Las consultoras contratadas por la Jefatura de Gabinete (y consumidas vorazmente por el asesor plenipotenciario Santiago Caputo) hablan de una pelea reñida en la Provincia. Allí, se analiza qué hacer si Cristina encabeza la lista de diputados del peronismo o si delega ese lugar. Nombres como el de la camporista Mayra Mendoza o el intendente de Pilar, Federico Achaval, cuadran como eventuales reemplazos.

Pero el «modo candidata» de CFK en La Matanza muestra a la ex Presidenta jugando a fondo. Eso llama también a los Milei a pensar en cómo administrar su relación con Mauricio Macri. Que La Libertad Avanza y el PRO no compartan boleta podría relegar a la fuerza libertaria a un eventual segundo lugar.

Para el analista Facundo Nejamkis, «es difícil imaginar que CFK no juegue en las elecciones del año que viene en provincia de Buenos Aires teniendo en cuenta tres factores: su alto nivel de imagen en el distrito, las buenas mediciones de intención de voto que está registrando el peronismo; y por último, sería una forma de resolver por arriba la interna que hoy protagonizan el gobernador y su hijo», señala el director de Opina Argentina.

De ser así, cuesta pensar que el triángulo Javier-Karina-Santiago Caputo postule a un hombre (José Luis Espert o Diego Santilli) en el primer lugar de la boleta para enfrentar a una mujer. Y más con la ferviente «peronización» del mileísmo, con el despliegue de micros que mostró el sábado pasado en Parque Lezama y con el armado bonaerense que llevan adelante Karina y Pareja.

Esa «peronización» podría apelar al recurso de «jugar» con mujeres, como sucedió desde Evita pasando por Chiche Duhalde hasta Cristina. Si -como señala Nejamkis- el peronismo mide en Provincia entre 40 y 45 puntos, ¿por qué debería caer, respecto de la última elección, con la cuestión económica en debate en la elección del año próximo?

Karina Milei es la única que puede arrastrar la misma cantidad de votos que hoy tiene Javier Milei y en el Gobierno lo saben. Por eso, «El Jefe» seguirá coacheándose para que la disfonía no altere sus próximos movimientos políticos.

Mientras tanto, el peronismo tiene a sus principales actores de recorrida: Axel Kicillof viajó a México a la asunción de la nueva presidenta Claudia Sheinbaum; el postulante a la presidencia del PJ Ricardo Quintela estuvo en el conurbano y se va a Neuquén; y Cristina Kirchner visitó La Matanza. El bonaerense se mostró con Lula Da Silva y meneó la foto con el mandatario brasileño, gesto que agrada al votante peronista. El gobernador riojano junta avales para ser el titular del partido, desafiando al kirchnerismo que no lo quiere en la poltrona pejotista y odia que no haya pedido permiso para jugar políticamente.

Y la ex Presidenta bajó a La Matanza, sin avisarles ni al gobernador ni al intendente local, algo que jamás había sucedido en la larga historia de entendimientos entre Cristina y Fernando Espinoza. La distancia de CFK con el matancero no obedece a la causa donde está procesado el alcalde sino a que Espinoza hoy juega con Kicillof en la interna, al igual que otros jefes comunales como Jorge Ferraresi y Mario Secco, que conforman una mesa axelista junto al platense Julio Alak.

Esta guerra fría tendrá más capítulos pues el gobernador Quintela cenó con los curtidos intendentes peronistas del conurbano Juan José Mussi y Julio Pereyra. Y ahora visitará Neuquén donde, supuestamente, el fiel cristinista Oscar Isidro Parrilli lo recibirá. Tal vez podría expresarle las molestias de su jefa política por su alineamiento con Axel Kicillof, hoy rival de Máximo Carlos Kirchner en la provincia mayor. Kicillof resuelve, por estos días, junto a sus funcionarios más activos políticamente -como Carlos Bianco, Andrés Larroque y Gabriel Katopodis- qué conducta tomar antes del 19 de octubre, cuando se vence el plazo para presentar listas, candidatos y avales para presidir el Partido Justicialista nacional. Horas de tensión…