El incidente ocurrió en la mañana de este lunes en un edificio de la calle Niceto Vega al 5900. Vecinos alertaron a las autoridades tras presenciar la caída y escuchar los desesperados gritos de auxilio de una mujer de 34 años. Bomberos de la Ciudad y efectivos de la Comisaría Vecinal 14 B llegaron al lugar, donde encontraron a la víctima tendida en la calle, con evidentes signos de politraumatismos.
Según el relato de la mujer, llevaba cinco años de relación con su pareja, un hombre de 54 años, también oriundo de San Juan. Ambos habían llegado recientemente a Buenos Aires, pero lo que comenzó como una convivencia se transformó en un infierno. La víctima denunció que su pareja la mantenía narcotizada y la explotaba sexualmente, situación de la que solo pudo escapar arrojándose desde el balcón al vislumbrar una mínima oportunidad.
Un grupo de vecinos, indignados por lo ocurrido, logró retener al acusado hasta la llegada de la Policía de la Ciudad, que procedió a su detención en calidad de incomunicado. La mujer, por su parte, fue trasladada de urgencia por personal del SAME al hospital Fernández, donde se confirmó que presentaba múltiples heridas producto de la caída.
El hecho quedó registrado en un video que circula en redes sociales, en el que se escucha a la víctima gritar desesperadamente: “¡Por favor, policía!”, mientras intentaba ponerse de pie, con evidentes dificultades para moverse. Testigos del hecho relataron que la mujer corría por la calle semidesnuda, clamando por ayuda y denunciando que era explotada.
El caso quedó a cargo del Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional Federal N°5, bajo la dirección de la jueza María Eugenia Capuchetti, quien ordenó la intervención de la División Trata de Personas de la Policía de la Ciudad, así como la consigna policial en el departamento donde ocurrieron los hechos.
Este caso no solo expone la brutalidad y el horror de la violencia de género, sino también la desesperación de una mujer que, ante la falta de alternativas, arriesgó su vida para escapar de una situación de esclavitud y abuso. Las autoridades tienen la obligación de garantizar que este tipo de crímenes no queden impunes y que se brinde a la víctima la protección y justicia que merece.