«* El foco de preocupación de la gente ha cambiado. Antes, la inflación ocupaba el centro de la escena en las angustias cotidianas. Hoy, el temor al desempleo empieza a pesar más en la balanza social. Muchos temen perder el trabajo o que sus ingresos no lleguen a fin de mes, y la plata se va rápido y no alcanza para cubrir necesidades básicas. El costo de vida sigue alto, pero la estabilidad laboral preocupa aún más, porque se instala la incertidumbre sobre el futuro económico de las familias. Los sueldos se lícuan frente a precios que, aunque suban menos, siguen subiendo, y eso se transforma en miedo, desconfianza y enojo hacia la política. El humor social está cada vez más tenso y volátil*».
aldo abram -economista- en sergio m. eiben-la red 89.3 mhz: «* EL MIEDO A PERDER EL TRABAJO ES MAS FUERTE AHORA QUE EL MIEDO A LA INFLACIÓN*»

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