Seducir a los más jóvenes y potenciar su plataforma multienergía -en la que convivan los autos eléctricos e híbridos- son dos de los grandes desafíos que enfrenta Alain Favey, el ejecutivo francés que acaba de asumir como CEO global de la marca Peugeot, tras una carrera de más 35 años en la industria que se inició en Citroën e incluyó pasos por Porsche, Skoda y Bentley Motors.
Favey visitó Buenos Aires para participar del lanzamiento del nuevo Peugeot 3008, un SUV de estilo fastback, y el Peugeot 5008, otro SUV de siete plazas que llega a competir al segmento C-SUV, y en una presentación con la prensa local, destacó el rol que tiene el mercado argentino para la marca francesa que hoy forma parte del grupo Stellantis. “Somos una marca que vende entre 1,1 y 1,2 millones de autos cada año y en los primeros 7 meses de este año vendimos 677.000 autos. Eso es un 7% más que el año pasado. El motor de este crecimiento es Sudamérica, porque Europa, en términos de mercado, está bastante estable. Y el corazón de este crecimiento proviene de la Argentina, por la expansión de la que está disfrutando el país, tras la apertura de la economía. En la Argentina tenemos un 9,1% de participación de mercado y no es un nivel que alcancemos en muchos países del mundo. Y saber que el modelo número uno del mercado el año pasado fue el Peugeot 208 es algo muy especial para nosotros”, aseguró el ejecutivo francés.
A la hora de precisar cuáles son los factores diferenciales de la marca, Favey no dudó en precisar tres pilares. “El diseño de un Peugeot es algo definitivamente especial y queremos que se vea diferente. Muchas marcas en realidad se parecen unas a otras y nosotros buscamos que Peugeot tenga una identidad visual fuerte y reconocible. No se trata solo de la apariencia exterior, sino también de la sensación que transmite al conducir, de la experiencia de usuario y del placer de estar dentro de un Peugeot. Otro elemento diferenciador es la tecnología y la innovación. Queremos que los autos Peugeot no solo sean bonitos, sino también inteligentes y eficientes. Por ejemplo, la conducción eléctrica e híbrida está cada vez más presente en nuestra gama, y Argentina será un mercado importante para el despliegue de estas tecnologías en el futuro. Y por último, la relación con los clientes y el servicio postventa es clave. Queremos que quienes compren un Peugeot se sientan parte de una comunidad, que tengan confianza en la marca y que disfruten de la experiencia completa, desde la compra hasta el mantenimiento del vehículo”.
Favey además destacó que uno de los retos que enfrenta en su nuevo rol pasa por conquistar a las nuevas generaciones. “Creo que tenemos modelos atractivos para los jóvenes y el carácter innovador que tiene la marca también ayuda a conectar con las nuevas generaciones. Históricamente Peugeot siempre ha traído mucha innovación, y siempre usamos esto en nuestra comunicación y en todo lo que hacemos. No está solo en nuestros productos, sino en cada acción que realizamos. Además, tenemos un porcentaje interesante de personas que compran su primer auto en la marca, por encima del promedio, comparado con otras marcas como Renault o Volkswagen. Es un promedio interesante, considerando que nuestro auto de entrada no es el más barato. Así que este es un dato para entender que tenemos modelos que atraen a los jóvenes”.
El CEO de Peugeot igualmente es consciente que la tarea que tiene por delante no es fácil, con un público joven que a nivel global se muestra mucho menos seducido por la idea de tener un auto propio. A la hora de explicar este “distanciamiento” entre la industria automotriz y las nuevas generaciones, Favey precisó que no hay una única razón. “Primero, los autos se han vuelto mucho más caros, especialmente para los jóvenes que recién comienzan a trabajar o a tener ingresos propios. El costo de entrada es alto, y muchas veces el primer vehículos requiere financiamiento, lo que no siempre es accesible para todos. Segundo, hay un cambio de mentalidad: muchos jóvenes hoy valoran más la movilidad compartida, aplicaciones de transporte y otras formas de moverse sin necesidad de tener un auto propio. Esto es especialmente cierto en grandes ciudades, donde tener un vehículo implica gastos adicionales de estacionamiento, mantenimiento y seguro. Y tercero, también está el tema de la tecnología y la conectividad. Los jóvenes esperan que un auto no sea solo un medio de transporte, sino que ofrezca conectividad, entretenimiento y una experiencia digital completa. Esto es algo en lo que estamos trabajando, integrando tecnología y servicios digitales para hacer que la experiencia de tener un Peugeot sea más atractiva”.
En diálogo con la prensa, Favey además ratificó la apuesta de la marca por la electrificación, aunque reconoció que se trata de un proceso que no será tan rápido como se esperaba. “Quizás el camino hacia la electrificación será un poco más lento de lo que pensábamos. Así que es un poco menos directo. Pero en Peugeot, siempre hemos tenido esta estrategia de multienergía. Nuestro enfoque siempre ha sido dejar la elección al cliente. Así que tenemos el mismo auto disponible como híbrido, como de combustión interna o como eléctrico, aunque vemos que los clientes no están eligiendo esta última opción rápido como pensábamos. Igualmente seguimos absolutamente comprometidos con descarbonizar el futuro. Europa está con temperaturas por encima de los cuarenta grados y Marsella casi se incendia a principios del verano. Son cosas que nunca habíamos visto antes. Como marca estamos comprometidos en ayudar a evitar el calentamiento global. La difusión y aceptación de los vehículos electrificados es muy diferente en cada mercado, no es lo mismo la Argentina que Uruguay, Chile o Colombia. Cada país tiene una historia diferente, son los mismos modelos, los mismos competidores, los mismos autos, pero la velocidad de aceptación de la electrificación es distinta. De todas formas, estamos muy enfocados en los híbridos, y creemos que realmente tienen un futuro y que tendrán una alta aceptación en la mayoría de los mercados, casi sin excepción”, aseguró.