Acto 1: Sesión de Fotos de Juan Carlos Gioja al mejor estilo «Modelo Masculino»
Juan Carlos Gioja, decidió que la mejor manera de demostrar su poder era con una sesión de fotos en Rawson. Sí, porque en política, si no hay foto, no existió. Y estas fotos no eran cualquier cosa: eran el equivalente a un «aquí estoy, no me olviden, y si pueden, voten por mí». Pero cuidado, porque el giojismo no quiere cualquier unidad: quiere una unidad donde ellos sean los protagonistas. ¿Ego? Nah, solo un poquito.
Acto 2: Quiroga Moyano y el WhatsApp Fantasma
Mientras tanto, el presidente del PJ, Juan Carlos Quiroga Moyano, sigue sin tener WhatsApp. ¿En serio? ¿En pleno 2024? Parece que Quiroga vive en una época donde los mensajes se enviaban por paloma mensajera. ¿Cómo hace para coordinar con su partido? ¿Usa telegramas? ¿O tal vez le escribe cartas con tinta y pluma? Lo único claro es que, si el PJ pierde las elecciones, ya sabemos a quién culpar: al que no tiene WhatsApp.
Acto 3: Uñac e Ibarra, del «Vos sos mi hermano…» al «Te espero en la esquina…».
La calentura de Mauri Ibarra fue el escándalo que puso patas arriba al peronismo sanjuanino. Tras la muerte del diputado Horacio Quiroga, el uñaquismo intentó reemplazarlo, pero todo terminó en un divorcio político más dramático que un capítulo de Caso Cerrado. Florencia Peñaloza, la titular de la Defensoría del Pueblo, renunció a la banca, y el bloquista Federico Rizo tomó su lugar. ¿Resultado? Mauricio Ibarra y el uñaquismo ahora están más distanciados que dos ex en una cena de Navidad.
Bonus Track: La Cámara de Diputados, un Circo Político
En la Cámara de Diputados, el peronismo empezó con una mayoría aplastante, pero poco a poco se fue desmoronando como un castillo de naipes. El bloquismo se fue, Marcelo Mallea pegó el portazo, y algunos diputados empezaron a votar en contra de la línea partidaria. ¿Qué pasó? ¿Se les olvidó el guion? ¿O simplemente decidieron que ser leales estaba sobrevalorado?
Epílogo: Los Intendentes, más Callados que un Mudo
Mientras tanto, los intendentes peronistas están más callados que un mudo en un concurso de ortografía. ¿Por qué? Porque saben que cualquier cosa que digan puede ser usada en su contra. Además, la billetera la tiene el gobierno provincial, así que mejor no hacer olas. ¿Plata para campañas? Olvídense. El PJ está más seco que un desierto y ninguno quiere meterse la mano al bolsillo.
Conclusión: ¿Qué nos depara el futuro?
El peronismo sanjuanino es como un culebrón: lleno de drama, traiciones, y personajes que no saben si están en el mismo equipo. ¿Qué pasará en las elecciones? Nadie lo sabe, pero una cosa es segura: esta telenovela política promete más giros inesperados que un capítulo de GAME OF THONES.