Los hinchas todavía están tratando de asimilar el fracaso internacional. A fin de cuentas, la derrota en los penales contra Alianza Lima fue uno de los papelones más grandes en la Libertadores, esa obsesión que Boca persigue desde 2007, la última vez que alzó la Copa. Y mucha más bronca les genera -tal cual se expresaron en las redes sociales- la victoria de los peruanos ante Deportes Iquique en Chile. Ya se imaginaban en la zona de grupos, pero no pasaron de la fase 2, que ni siquiera les ofreció el consuelo de la Sudamericana.
En este contexto, desde el viernes pasado comenzaron a pasar sus facturas. Y aunque desde hace dos semanas vienen cantando contra los jugadores, no todos están apuntados. Sin ir más lejos, Edinson Cavani y Agustín Marchesín recibieron aplausos, más allá de dos situaciones decisivas en la serie contra el conjunto que dirige Néstor Gorosito. El uruguayo se comió un gol abajo del arco en el minuto 97, una jugada que podría haber cambiado la historia. El arquero, en tanto, le cedió su lugar a Leandro Brey a la hora de la definición desde los doce pasos. Claro que Van Gaal hay uno solo y la táctica que utilizó el entrenador neerlandés en Brasil 2014 no funcionó a orillas del Riachuelo.
Fernando Gago, claro está, es el principal foco de las críticas de la gente. No obstante, hay un futbolista que se ganó los silbidos: Marcos Rojo, ni más ni menos.
Cuando comunicaron desde los altoparlantes la formación para enfrentar a Rosario Central, el abucheo para el referente y segundo capitán fue estruendoso. Rojo jugó todo el partido y tuvo una correcta actuación, pero el mensaje de la tribuna no pasó inadvertido. “Lo único que puedo decirles a los hinchas es que vamos a seguir trabajando duro para cumplir con los objetivos que tenemos por delante”, afirmó. Y les tiró flores: “Le agradezco el apoyo que nos dan acá y afuera también, cuando salimos de visitante. Siempre me sigue sorprendiendo lo de la gente de Boca. Ya cuando salís al túnel y entrás a la cancha, ver cómo nos acompañan, cómo nos alientan, es muy lindo. Siempre me tomo un minuto para disfrutar del ambiente”.
La realidad es que Rojo recién pudo completar dos partidos ante los peruanos y los rosarinos, ambos en la Bombonera. Antes, sólo había podido jugar 103 minutos sobre 720 posibles. Disputó el primer tiempo ante Argentinos Juniors, durante el debut de Boca en el Torneo Apertura, y faltó cinco fechas seguidas en el ámbito local y el duelo de ida contra Alianza Lima en Perú producto de una inflamación en el tendón de Aquiles.
Las lesiones del zaguero central de 34 años son recurrentes. El año pasado apenas jugó 30 de los 58 partidos disputados por Boca. Entonces, tuvo varios desgarros y un problema en el tobillo que conspiraron contra su continuidad. Y del mismo modo arrancó 2025, con el agravante de que trascendieron fotos suyas, y de Cristian Lema, en un boliche de Puerto Madero.
Es cierto que los jugadores tenían la noche libre, pero sucedió unos días después de la caída ante Alianza Lima y todavía estaba fresca la herida de la gente. La noticia se viralizó tras la presentación de las imágenes en las redes sociales. Ahí podía verse a los zagueros centrales risueños. Lema, a diferencia de su compañero en la defensa, no es tenido en cuenta por el entrenador.
Rojo no es el único futbolista que está en la lista negra de los hinchas. Hace tiempo que las tribunas perdieron la paciencia con Frank Fabra. Ni siquiera el hecho de que haya bajado 6 kilos y sea una alternativa para Gago cambió el panorama. Al colombiano le reclaman sus errores en las Copas Libertadores de 2021 y 2023, contra Santos y Fluminense.
Mañana tendríamos que estar jugando con Iquique, y los locos andan de joda a la madrugada, ahí va che.
Después se preguntan los periodistas porque viven lesionados, acá está el porque: pic.twitter.com/uldOf3qHr6
— 🥊𝕳 BARRAS DEL MUNDO ⚽🍺 (@Barras_LATAM) March 3, 2025
Otro que está en la mira es Lucas Janson. Llegó a Boca en 2023, jugó 45 partidos y apenas marcó 3 goles. El técnico le dio la chance de jugar ante Aldosivi y recibió una silbatina cuando fue reemplazado por Kevin Zenón en el final del duelo con los marplatenses. Disputó 135 minutos en esta temporada.
Sergio Romero, fuera de la escena por una lesión en la rodilla derecha, también es un foco de conflicto. No solo por sus bajos rendimientos en el arco. Todos recuerdan el cruce de Chiquito con los plateístas después de la derrota en el último Superclásico.
En los cuatro casos, hay un denominador común: todos fueron compañeros de Gago. Rojo y Romero en la Selección Argentina, Fabra en Boca y Janson en Vélez. Por eso el técnico, más allá de que es un hombre exigente, les dio tantas oportunidades. Muy a pesar del humor de los habitantes de la Bombonera, claro.