Durante la noche del sábado en la que primero se mostró amenazante desde un palco del recinto de la Cámara de Diputados y luego bajó al primer piso para increpar al diputado Facundo Manes, Santiago Caputo estuvo rodeado por parte del equipo con el que comanda la Comunicación Digital del Gobierno pero también con algunos dirigentes que revisten en otros organismos del Ejecutivo.
Desde el palco de la Cámara Baja, el asesor presidencial se mostró casi pegado a Sebastián Amerio, el viceministro de Justicia, y con Daniel Parisini, alias Gordo Dan, el tuitero oficialista que en la última semana lo visitó con asiduidad en sus oficinas del primer piso de la Casa Rosada.
Un poco detrás se dejaron ver Lucas «Sagaz» Luna, un operador del asesor que además fue ungido como coordinador de LLA en Tres de Febrero, el partido del noroeste del GBA que gobierna el aliado Diego Valenzuela. También presenció el discurso de Javier Milei, el jefe de la bancada de LLA de la Cámara de Diputados bonaerense, Agustin Romo, quien junto a Gordo Dan es uno de los impulsores de la enigmática «Las Fuerzas del Cielo», la agrupación que se presentó como el «brazo armado de Milei» pero que conforme el paso del tiempo ha ido perdiendo impulso.
Casi semioculta, apareció Macarena Alifraco, integrante del equipo de Caputo e hija del legislador Edgardo Alifraco, del MID, cercano al diputado Oscar Zago. Junto al asesor, Romo, Dan y otros tuiteros oficialistas viajó recientemente a Washington para participar de la CPAC en la que disertó Milei y Donald Trump.
Además, compartieron escenario la noche del sábado Juan Carreira, alías Juan Doe en X, director de Comunicación Digital de Presidencia, y Tomás Jurado, que administra la cuenta «Peluca» en X, e integra esa secretaría, la que tiene su sede en el Salón de los Próceres de Casa de Gobierno.
Con excepción de Amerio, el grupo tiene algo en común: son la infantería digital de Milei en las redes sociales e intentan no sólo influir en la conversación pública sino también mostrarse como un engranaje más de la «batalla cultural» que libra el líder libertario.
Dos ex socios de Caputo en su consultora de opinión pública, Rodrigo Lugones -hijo de Mario, el ministro de Salud- y Tomás Vidal, también colaboran con el devenir del relato libertario. El primero combina residencia en España y en el país y el segundo tendría oficinas en un edificio de calle Reconquista, donde también funcionaría la Fundación «El Faro». Esa entidad, que presidente el escritor Agustín Laje, tendría como objetivo formar cuadros libertarios pero también recaudar fondos para lo que será la próxima campaña electoral de LLA.
Otro ex socio del asesor todoterreno del Presidente, Guillermo Garat, se desempeña como vicepresidente de Relaciones Institucionales y Comunicación de YPF: allí administra desde la millonaria pauta de la petrolera con los medios hasta la contratación de figuras como Lionel Messi.
Otro funcionario que colaboró con el proyecto electoral del grupo de los tuiteros que responden a Caputo en la Provincia es el secretario de Culto, Nahuel Sotelo, con militancia en Quilmes, en la tercera sección electoral. También estuvo en el lanzamiento de «Las Fuerzas del Cielo» en diciembre pasado en un teatro de San Miguel, el subsecretario de Políticas Universitarias, Alejandro «Galleguito» Álvarez.
Pero quizás la presencia más inquietante que se suele observar rodeando las galerías del Patio de las Palmeras en camino hasta el Salón Martín Fierro, donde tiene sus oficinas Caputo, es la del titular de la Side, Sergio Neiffert. El ex dirigente del municipio de Malvinas Argentinas conoció al consultor a través de su padre. Pero este funcionario casi no pesó en la reformulación del organismo de inteligencia, donde talló el secretario de Asuntos Estratégicos de Jefatura de Gabinete, José Luis Vila.
