El ministro de Justicia, Mariano Cúneo Libarona, defendió a Ariel Lijo y su designación por decreto como integrante de la Corte Suprema y, en medio de los cuestionamientos de diversos sectores políticos y hasta empresarios, aseguró que el juez «es respetado por todos sus colegas» y que no pesa sobre él ninguna denuncia consistente.
«No tiene una causa en trámite. Si tan mal hablan, ¿por qué no lo destituyeron antes? Si tan mal hablan de él, ¿por qué estos señores no lo denunciaron ni encontraron un delito?», sostuvo con contundencia en declaraciones a LN+. Cúneo Libarona valorizó al polémico juez -hasta este martes- federal desde lo personal. «Es respetado por sus colegas, es querido y admirado por secretarios y empleados», insistió.
En su argumentación en favor del polémico juez con despacho en Comodoro Py, Cúneo Libarona puso el foco en la especialidad de Lijo y recordó que, en la composición actual, “la Corte no tiene un penalista desde que se fue (Raúl Eugenio) Zaffaroni”, y, con anterioridad, tras la muerte de Carmen Argibay.
«Lijo es un penalista que fue docente, que dio muchas conferencias, que tiene un pergamino importante”, enfatizó el ministro en su plan de ensalzar al designado cortesano.
Los elogios del abogado que dirige el Ministerio de Justicia al nuevo miembro de la Corte Suprema, aún exagerados, al menos tuvieron su coincidencia con una voz del ámbito judicial que sorprendió este miércoles en su respaldo a Lijo.
Fue la de Julio Piumato. Ante la designación, el sindicalista distribuyó un comunicado de la Unión de Empleados de la Justicia de la Nación -el gremio que dirige- y consideró que la llegada «será un aporte fundamental para la tarea del más alto tribunal de la Nación, tanto en lo jurídico como lo institucional».
Foto Marcelo Carroll
Frente a las fuertes críticas por la forma en que tanto Lijo como Manuel García-Mansilla llegaron a la Corte Suprema, el funcionario del gabinete de Javier Milei insistió en que “no se puede discutir la legitimidad” del procedimiento utilizado -el decreto presidencial que los designó en comisión- y trazó un paralelismo con la forma en que Horacio Rosatti y Carlos Rosenkrantz se integraron a ese órgano durante la administración de Mauricio Macri.
“Rosenkrantz y Rosatti aceptaron el procedimiento en su momento. ¿Ahora van a decir que es ilegal el proceso que ellos aceptaron?”, expuso en busca de una futura contradicción de los jueces.
«El Senado duerme la siesta», el dardo de Mariano Cúneo Libarona
Para Cúneo Libarona, el Presidente debió recurrir a un decreto ante las demoras legislativas en tratar las candidaturas que propuso. «El Senado duerme la siesta”, apuntó el ministro de Justicia, en un elíptico disparo hacia la cámara que preside Victoria Villarruel, que no logró cumplir con la idea de tratar los pliegos en sesiones extraordinarias. «El Presidente se cansó de esperar«, puntualizó.
«Lo dilataron, lo demoraron y el Presidente tomó el toro por las astas y dijo ‘vamos, adelantemos. Sería ideal que la Corte funcione con cinco jueces, es lo mejor para la sociedad y la justicia. Avancemos’”, agregó, con citas a Javier Milei.
En ese contexto, descartó que la determinación presidencial de ir por la vía del decreto esté relacionada con la falta de voluntades para acompañar el nombramiento que propuso. “Es una interpretación”, respondió Cúneo Libarona cuando le preguntaron si Milei recurrió a ese camino porque el oficialismo “no tenía los votos”.
El jueves de la semana pasada, el Gobierno fracasó en su intento de avanzar con la aprobación en la Cámara alta del pliego de Lijo. Como contó Clarín, en la reunión de labor parlamentaria previa a la sesión para votar la suspensión de las PASO, el oficialismo confirmó que sin el acompañamiento del peronismo y los bloques dialoguistas, ni siquiera tenía garantías de conseguir quórum para avanzar en su objetivo.
Este lunes, ante este escenario adverso, el Presidente adelantó la firma del decreto que, un día después, fue publicado en el Boletín Oficial.