Más de 20 años de vuelos tenía el avión que pasará a la historia por haber protagonizado un trágico choque con un helicóptero este miércoles a la noche, mientras se aproximaba a la pista del Aeropuerto Nacional Reagan de Washington, situado en las inmediaciones del río Potomac. El vuelo 5342 procedía de Wichita, Kansas.
La aeronave, en la que viajaban 60 pasajeros y cuatro tripulantes, era un Bombardier CRJ700 operado por PSA Airlines (una filial de American Airlines). Este modelo es una versión alargada del CRJ200 y tiene capacidad para 78 pasajeros, según indica el sitio Air Charter Service. Además, se señala que fue lanzado oficialmente en 1997 y realizó su primer vuelo de prueba el 27 de mayo de 1999.
Este es el accidente aéreo más grave ocurrido en territorio estadounidense para American Airlines en los últimos 24 años. El último ocurrió en 2001, cuando el vuelo AA 587, operado con un Airbus A300, se estrelló en el vecindario de Queens, tras despegar del Aeropuerto John F. Kennedy en Nueva York. El saldo trágico fue de 265 muertos.
Además, es el primer accidente que involucra un CRJ 700 y el más grave de una aeronave fabricada por Bombardier, según informaron medios locales.
Por otro lado, según las primeras informaciones, el helicóptero (UH-60 Black Hawk) que sobrevolaba el aeropuerto realizaba un «vuelo de entrenamiento«, indicó el secretario de Defensa estadounidense, Pete Hegseth, quien calificó el accidente de «absolutamente trágico«.
En la aeronave, que tenía capacidad para transportar a 15 personas, se encontraban a bordo tres militares que, según las primeras versiones que circularon, no habrían escuchado las alertas de la torre de control que informaba que estaban en la ruta del avión comercial.
El helicóptero estaba asignado a la Compañía Bravo del 12º Batallón de Aviación, que opera desde el Aeródromo del Ejército Davidson en Fort Belvoir, Virginia, según indicó Heather Chairez, jefa de medios de la Fuerza de Tarea Conjunta-Región de la Capital Nacional, a través de un comunicado.