erano libertario: Las dipu-hot al rescate (de sus redes, no del país)
Cuando legislar se pone difícil, siempre quedan las fotos en bikini y los likes.
En este verano 2025, las diputadas libertarias no solo se tomaron vacaciones del Congreso, sino también de la vergüenza. Entre poses en bikini, frases delirantes y un Instagram que parece más una publicidad de bronceadores que una cuenta política, las representantes de Milei han inaugurado la era de las dipu-hot. Porque si el Congreso no arde de debates, por lo menos que arda de memes.
El fin del pudor político
¿Se acuerdan de esos tiempos en los que una política como Malena Galmarini o Victoria Tolosa Paz no se animaba a mostrarse en bikini y huía de los fotógrafos en la playa con un pareo? Bueno, eso quedó tan viejo como el fax. Las libertarias han tomado el verano por asalto, redefiniendo el concepto de representación popular: menos leyes, más likes; menos debate, más poses. Y si hay algo que no falta en sus fotos es el aire de “teoría libertaria pero make it sexy”.
Tour político o promoción turística, quién sabe
Lilia Lemoine, por ejemplo, hizo un recorrido digno de una influencer de travel. Desde Córdoba hasta los Cajones del Durazno, pasando por un rescate heroico de un colibrí en Agua de Oro (porque si no podés salvar al país, al menos salvá a un pajarito), la diputada dejó claro que su pasión por la fauna solo es superada por su pasión por los filtros de Instagram. Ah, y no olvidemos su marcha en Villa Allende contra el intendente del PRO, donde aprovechó para sacar pecho… literalmente.
Juliana Santillán también aportó lo suyo, con un verano que combinó turismo y ortografía creativa. Desde el “Serro Campanario” en Bariloche (gracias, autocorrector, por nada) hasta su photoshoot en los acantilados de Mar del Plata con una tabla de surf. Porque nada dice “oposición política seria” como una foto con cara de revista, aunque nadie esté seguro de si sabe nadar.
La diputada modelo: el arte de lucir bien y legislar poco
Lourdes “Lu” Palavecino, diputada suplente y modelo profesional, demostró que sus habilidades con las cámaras están a años luz de sus aspiraciones legislativas. Con sus bikinis estratégicamente elegidos y una amistad cercana con Lemoine, Palavecino sigue ganando seguidores mientras espera, tal vez, alguna oportunidad en el Congreso. Por ahora, su principal proyecto sigue siendo ella misma.
Cuando un chihuahua trabaja más que una diputada
María Celeste Ponce, por su parte, prefirió diversificar su verano: publicó fotos junto a su chihuahua Jorge, quien ya tiene más publicaciones en Instagram (@jorgeelchihuahua) que proyectos en el Congreso. Mientras su única propuesta legislativa perdió estado parlamentario, el pequeño Jorge se erige como un influencer emergente. Dicen que está cerca de firmar un contrato para promocionar snacks de perros. Un verdadero ejemplo de libertad económica.
¿Es política o una remake de “Gran Hermano”?
Las dipu-hot no dejan dudas: si el Congreso fuera un reality, ellas ya habrían ganado el premio al contenido más viral. Entre bikinis, frases dignas de un guion mal escrito y destinos turísticos de ensueño, han logrado lo que pocos: que sus vacaciones generen más interés que su trabajo legislativo. Y si bien algunos critican su falta de propuestas, ellas responden con un lema claro: “Menos impuestos, más bronceados”.
En este verano libertario, las leyes pueden esperar. Lo importante es el contenido. Y entre un país en crisis y un filtro bien puesto, está claro qué eligieron nuestras representantes. Después de todo, la casta no es solo un enemigo político, también es algo que se toma con soda… y con una buena foto desde la playa.