Boca mantiene dos negociaciones abiertas de cara al cierre del libro de pases. Ninguna de las dos parece ser sencilla, más allá del optimismo con el que trabajan los dirigentes. El sueño máximo es repatriar a Leandro Paredes. Y la necesidad, por la operación de la rodilla derecha de Chiquito Romero, es el arquero de Gremio Agustín Marchesín, quien este viernes envió un comunicado de prensa a los medios brasileños para explicar su situación.
“Por respeto a nuestros aficionados, quiero dejar claro que no estoy implicado de ninguna manera en una posible situación de mercado entre clubes. Siempre he respetado a las instituciones para las que he trabajado, tengo contrato en vigor y mantengo mi actitud profesional, independientemente de las especulaciones que se han publicado recientemente», expresó el ex Lanús en el texto que redactó con su equipo de prensa y que divulgó Globo Esporte.
Y agregó: «Creo que los hinchas del Gremio me conocen un poco mejor por todo lo que he hecho desde la primera vez que vestí la camiseta del club. Lo doy por hecho y comprendo que eso es consecuencia del trabajo individual y colectivo que se realiza en el terreno de juego. Gracias. Agustín Marchesín».
¿Por qué Marchesín, que no se entrena por una molestia muscular, tuvo que salir con un comunicado de prensa? Porque en los medios del vecino país se dice que el futbolista de 36 años está haciendo fuerza para salir de Gremio y cumplir su sueño de jugar en Boca. Esa actitud habría generado bronca en los hinchas del cuadro de Porto Alegre y por eso el arquero salió a desmentir su supuesta presión.
De todos modos, en Boca siguen siendo optimista de cara a la negociación. “Me levanto todas las mañanas con una oferta nueva de algún arquero. Estamos tranquilos y sabemos de que todos los días se nombra, pero nosotros trabajamos en silencio. Vamos a esperar. Todos los que nos han ofrecido son buenos arqueros”, dijo Raúl Cascini, integrante del Consejo de Fútbol, en ESPN.