La anécdota la contó Roberto Souviron, uno de los cinco fundadores de Despegar y exCEO del unicornio argentino. Era 1998 y Souviron estudiaba en Estados Unidos, en la Universidad de Duke. A fin de año, como todos los años, quería pasar las fiestas en la Argentina. Entonces fue a una reconocida agencia de viajes para comprar un pasaje, pero la experiencia lo exasperó. La fila era larga y no se movía. Después de 15 minutos en el mismo lugar, Souviron dejó la fila, volvió a su casa e ingresó a Travelocity. Compró el pasaje online.
Eran los inicios del e-commerce y la experiencia fue el germen de una idea multimillonaria: había que hacer un Travelocity en la Argentina. Un año después, Souviron se juntó con un grupo de amigos y emprendedores -Alejandro Tamer, Christian Vilate, Mariano Fiori y Martín Rastellino, todos sub30- para lanzar Despegar. Cada uno aportó alrededor de US$15.000. Ninguno contaba con trayectoria en el sector.
Pero eso no importó. Fundada en 1999, Despegar logró posicionarse rápidamente como líder en el rubro. La compañía esquivó el colapso de la burbuja puntocom, consiguió financiamiento de Buenos Aires Capital -US$1 millón, en el año 2000- y de Merrill Lynch -US$10 millones, también en el año 2000-, y en 2017, con su expansión regional ya consolidada, empezó a cotizar en Wall Street. Hoy, la empresa opera en 19 países, y espera cerrar este año con una facturación de US$760 millones y un Ebitda ajustado de US$170 millones.
La trayectoria de Despegar, que también supo sortear la pandemia de Covid, atrajo finalmente la atención de un inversor global. Hoy, Prosus informó en un comunicado que adquirió al unicornio. Los accionistas de la empresa argentina recibirán US$19,50 por acción en efectivo, lo que representa una prima de aproximadamente el 33% sobre su precio de cierre al 20 de diciembre de 2024. La transacción valora a Despegar en aproximadamente US$1700 millones.
“Estamos encantados de unirnos al Grupo Prosus, ya que representa un importante paso adelante en nuestra misión de ampliar nuestro liderazgo en el mercado, y expandir nuestros servicios en toda América Latina. Esta transacción nos permitirá contar con la extensa red de empresas y el sólido balance de Prosus, acelerando nuestras estrategias de crecimiento e innovación”, expresó Damián Scokin, el actual CEO de Despegar, tras comunicarse la transacción.
De los cinco socios fundadores, solo Rastellino ocupa un lugar en el directorio de la compañía. La dirección de todas las operaciones está a cargo de Scokin, un exMcKinsey y Latam, que fue convocado para ser el CEO global de la compañía en diciembre de 2016 y, según trascendió, continuará al frente de la compañía.
Para 2025, la empresa proyecta un crecimiento superior al 20% en 2025 en reservas y en facturación en América Latina por una mejora en Argentina, una estabilización de las monedas en la región y una expansión a Europa y Estados Unidos, según adelantó Scokin hace unas semanas.