Locales propios, crecimiento en el interior y mantener la producción nacional son las tres premisas que definió el grupo panameño Regency, que hace un par de años se alzó con el negocio de Nike para el mercado argentino y ahora acaba de anunciar el regreso de la marca a la calle Florida.
Con una inversión de US$2 millones, la apertura del Nike Galerías Pacífico representa una apuesta de la marca a recuperar una de las esquinas comerciales más emblemáticas de la ciudad, como es Florida y Córdoba.
“Si bien el canal de venta digital es fundamental, estamos convencidos de que las tiendas físicas son esenciales para nuestra estrategia de omnicanalidad, porque es el lugar privilegiado para desarrollar la conexión uno a uno con el cliente y por eso encaramos un plan de aperturas muy agresivo. Este año sumamos siete locales propios y para 2025 esperamos abrir por lo menos la misma cantidad de tiendas”, explicó a LA NACION Federico Tórtora, general manager de Southbay, la sociedad que es la distribuidora oficial de la marca Nike en la Argentina y Uruguay y que pertenece al grupo Regency.
Tórtora es un ejecutivo que lleva más de 20 años en Nike y que quedó al frente del negocio cuando en junio de 2022 los nuevos dueños panameños se hicieron cargo de la marca, en un plan de expansión en el mercado argentino que también incluye el manejo de la licencia de Zara en el país.
En la actualidad, Nike suma 19 puntos de venta a nivel nacional, de los cuales cuatro son franquicias y ocho funcionan como outlets. La estrategia de la marca es crecer con locales propios, con la mira puesta principalmente en el interior del país. “Este año inauguramos la primera tienda propia en Rosario y estamos convencidos de que hay oportunidades para llegar a otras ciudades con este modelo de locales”, señaló Tórtora.
El número uno de Nike Argentina además destacó que la apertura de la economía y las facilidades para importar que impulsa el Gobierno nacional no modificarán su política de fabricar en el país los modelos más baratos de calzado y algunas líneas de indumentaria.
“Nos gusta competir y personalmente estoy de acuerdo con todas las medidas que signifiquen desregular el mercado y darle opciones para elegir al consumidor. Además, la producción nacional es competitiva en muchas categorías, como en el caso de Derwill, nuestro proveedor de medias, que es el mayor exportador textil de la Argentina”, señaló Tórtora.
“La pandemia ya demostró las ventajas de tener producción en el país. Aunque sabemos que hay que mejorar la competitividad y hay un camino para recorrer no solo por parte de la industria, sino también del Gobierno para hacer que los costos locales sean mejores”, agregó.