Son traidores a la Patria

Javier Milei endureció este lunes su postura sobre el conflicto que la semana pasada terminó con la salida de la canciller Diana Mondino: afirmó que la exfuncionaria cometió un «error imperdonable» y anticipó que va a sumariar y echar a todos los responsables del voto argentino contra el bloqueo de los Estados Unidos a Cuba.

El presidente habló este lunes en el programa de televisión que conduce su pareja Yuyito González, en una entrevista que se extendió durante casi dos horas, en la que se animó a cantar y terminó compartiendo el living con algunos de los colaboradores más cercanos, como el vocero Manuel Adorni, la ministra Sandra Pettovello y la diputada Lilia Lemoine.

En una charla que fue fluctuando entre un puñado de definiciones políticas y las intimidades de la vida privada de la pareja, uno de los puntos más álgidos fue el conflicto en Cancillería. La semana pasada su vocero había dicho que los funcionarios que no se alinearan a la postura del libertario sobre política internacional tenían la libertad de dejar el Gobierno. Sin embargo, este lunes Milei fue más directo: los trató de imbéciles, traidores a la patria y dijo que los despedirá.

«Monitoreamos mucho las redes todo el tiempo, porque a la velocidad que bajan las redes en caso que aparezca un problema se puede resolver muy rápido», afirmó en el comienzo de la charla y luego asoció directo con el conflicto de Cancillería al afirmar: «El imperdonable error de Mondino le costó el puesto a los 30 minutos».

«Mi política internacional, cuando ibas a los actos, había muchas banderas de Israel. Mi alineamiento era con Estados Unidos e Israel, no podés ir a una votación donde todos los países quedan de un lado, Estados Unidos e Israel del otro», planteó. «No solo le costó el puesto (a Mondino), sino que estamos haciendo todo un trabajo donde todos los responsables van a ser sumariados y echados«.

Luego arremetió contras los funcionarios, a los que acusó de «estar enamorados» de la burocracia internacional. «Un conjunto de imbéciles que se creen que le pueden manejar la vida al resto no lo voy a permitir, mucha gente de cancillería esta enamorada por ese rol que les da, pero si quieren manejar un país que ganen las elecciones», afirmó.

«Todas esas personas involucradas en esa decisión, estoy para echarlos a todos, son traidores a la Patria. Estamos viendo el formato legal por el cual echarlos y hacerles pagar. La política exterior la fija el presidente, no podés votar cualquier cosa porque a vos te parece», sumó.

El Presidente volvió este lunes a sembrar dudas sobre el ataque al Comité Nacional de la UCR y lo asoció a una presunta destrucción de pruebas por las auditorias que se ordenaron hacer a las universidades.

«Apareció la típica técnica de romper la evidencia, justo esta semana que la UBA se niega a ser auditada, justo se le meten en la oficina a Lousteau. Qué casualidad ¿no? Por no decir, ¡que escándalo!»», afirmó.

Respecto del conflicto con las universidades, reiteró que no tiene previsto privatizarlas o arancelarlas. «Lo único que estábamos pidiendo era auditarlas, la imagen paso a estar nos 85 a 15 arriba. Todos valoran la universidad, pero no quieren que los roben. (Emiliano) Yacobitti, (Martín) Lousteau, decían ‘vengan a auditar’, pero cuando fuimos, no nos dejaron», agregó apuntando contra los referentes radicales.

Tras algunos momentos distendidos, en los que se animó a cantar canciones de Elvis Presley y Nino Bravo con su pareja, el Presidente volvió a descargar su furia contra los militantes de izquierda, a quienes trató de «minusválidos» y les atribuyó enfermedades mentales y «del alma».

«La basura que es la izquierda en todos lados, cobardes, minusválidos en el aspecto que los mires«, aseveró y dijo planteó que ser de izquierda implicaría «algún tipo de un problema mental. Es tan contundente la evidencia empírica, se niegan a aceptarla, algún tipo de traba que no les permite ni siquiera ver los números, son enemigos de los números, odian», afirmó.

«Los zurdos no se si odian más bañarse que los números, son muy violentos», siguió y luego continuó: «Ser de izquierda es una enfermedad del alma, la izquierda se construye sobre envidia, resentimiento, trato desigual ante la ley, la violencia. Siempre los zurdos recurren a la violencia física porque son incapaces de rebatir argumentos, es el elemento central».