La tormenta tropical Oscar avanzaba este lunes por el este de Cuba el lunes por la mañana tras haber tocado tierra como un huracán de categoría 1 en una isla ya afectada por un enorme apagón.
Sus vientos máximos sostenidos alcanzaban los 95 kilómetros por hora la madrugada del lunes mientras el sistema se desplazaba al oeste-suroeste a 8 km/h, indicó el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos en Miami.
Oscar tocó tierra en la provincia oriental de Guantánamo, cerca de la ciudad de Baracoa, el domingo por la tarde con vientos de 120 km/h.
Se reportaron lluvias e inundaciones en zonas bajas en provincias orientales. Medios cubanos informaron de marejadas de 2 metros (6,5 pies) en la costa, y daños en tejados y muros en Baracoa.
Se esperaba que la tormenta atravesara la isla el lunes y se acercara al centro de las Bahamas el martes, según meteorólogos en Estados Unidos.
Cuba sufrió un corte de electricidad generalizado el viernes. Parte del servicio se restableció el sábado, pero la mayoría de la población seguía sin luz. El ministro de Energía expresó su esperanza de que la red eléctrica pudiera repararse el lunes o el martes.
En una conferencia de prensa el ministro de Energía y Minas, Vicente de la O reconoció que la llegada del huracán Oscar agregará en el este del país un “inconveniente adicional” a la recuperación eléctrica, pues —dijo— en esa área se encuentra un “polo fuerte de generación” del fluido.
Precisamente en esa zona se encuentran las plantas de Felton, en Holguín; Renté, en Santiago de Cuba; la de Moa, y una de las patanas que las autoridades tienen contratadas a Turquía para la producción.
El presidente, Miguel Díaz-Canel, reconoció durante una comparecencia el domingo que la gente estaba disgustada por la falta de luz y hubo quejas más o menos enérgicas.
“Hay toda una capacidad desde el partido y otras organizaciones para dar respuesta a las inquietudes de la población, siempre que sea de manera decente, organizada, civilizada y disciplinada», dijo el mandatario, que advirtió que “no vamos a permitir que nadie actúe provocando hechos vandálicos y mucho menos alterando la tranquilidad ciudadana de nuestro pueblo”.