Faustino Oro se ha convertido en una celebridad del ajedrez internacional. Guste o no, parezca exagerado o no, suene a chauvinismo o no, la única verdad es la realidad. Si desde antes de convertirse en el maestro internacional más joven de la historia el prodigio argentino de 10 años captaba la atención de los fanáticos de los trebejos y de los curiosos por el personaje, una vez conseguido ese logro todo se disparó. Tanto es así que este viernes el pibe participó del Marca Sport Weekend, organizado por ese diario deportivo español en Málaga, jugó simultáneas contra doce rivales y luego enfrentó a un ex entrenador de Lionel Messi en Barcelona. Sí, les ganó a todos.
El último mes de Faustino fue fenomenal en lo humano y en lo profesional. Porque más allá de seguir jugando -y ganando- partidas contra grandes maestros en los torneos de ritmo blitz de Chess.com, estuvo en contacto con la elite internacional.
Fue invitado a la Olimpíada de Budapest, donde no solamente vio de cerca a los mejores, de Magnus Carlsen para abajo, sino que hizo la movida inaugural en la sexta ronda y se dio el gusto de ser el capitán del equipo argentino masculino, porque le cedió su lugar en un par de ocasiones Robert Hungaski.
Compartir ese torneo bienal por equipos al que seguramente irá como jugador ha sido una experiencia fascinante para él, pero acto seguido tuvo que volver a España, donde reside con sus padres desde fines del año pasado, para disputar el exigente Campeonato Iberoamericano en Linares, mítica sede del ajedrez por aquellos inigualables torneos jugados en los 90 por Garry Kasparov, Anatoli Karpov, Viswanathan Anand, Vasili Ivanchuk, Alexei Shirov, Vladimir Kramnik, Veselin Topalov y Judit Polgar, entre otras leyendas.
Fausti finalizó 13° en el Iberoamericano, con 6 puntos en 9 rondas y una ganancia de 7,3 puntos de ELO. Derrotó a dos maestros internacionales y entabló con otros dos. Perdió su invicto de 37 partidas a ritmo pensado al caer en la séptima rueda ante el gran maestro venezolano, nacionalizado español, Eduardo Iturrizaga. Y en la última ronda se dio el lujo de entablar de negras ante el gran maestro español Francisco “Paco” Vallejo Pons, quien llegó a ser 27° del mundo en octubre de 2020.
Faustino Oro se dio el gusto de hacer la movida inicial de la sexta rueda de la Olimpíada de ajedrez, en Budapest, delante del campeón mundial, el chino Ding Liren.Foto FIDE
Invitado de honor
El diario deportivo “Marca” organiza entre este viernes y el domingo 13 sus tres jornadas con paneles temáticos sobre distintas disciplinas en Málaga.
Desde un torneo de golf, una mesa redonda sobre piratería en redes y una clínica de judo hasta charlas con Koke, Rudy Fernández, Connor McGregor y Carlos Sainz. Pues bien, este viernes a la tarde una actividad fue “El Messi del tablero”. Tranquila la presentación para Faustino Oro.
En el Real Club Mediterráneo de Málaga, el pibe argentino se presentó con un yeso en su brazo izquierdo. “Se quebró el radio distal en Educación Física en el colegio, pero como es el izquierdo no le impide jugar online así que tan triste no está, je”, le contó Alejandro, su padre, a Clarín.
Los doce jóvenes rivales, algunos de entre 1.900 y 2.000 puntos de ELO, se sentaron a la mesa y comenzaron las partidas.
En una simultánea, un jugador -en este caso, Faustino, de 2.434 de ELO- enfrenta a todos al mismo tiempo. Camina de tablero en tablero y cuando está frente a un rival, éste debe realizar una movida para que el maestro piense y responda. Así, durante todas las partidas. Pues bien, el pibe Oro les ganó a todos.
Luego llegó el momento de enfrentar a Enrique Setién, ajedrecista desde su niñez, quien tuvo el privilegio de jugar simultáneas contra Karpov y Kasparov. Claro que Quique es más conocido por haber sido entrenador de Messi en Barcelona durante 25 partidos en 2020. Pues bien, jugaron dos partidas rápidas… y Fausti ganó las dos.
“Faustino lleva una proyección extraordinaria y seguramente lo veremos en lo más alto de la elite”, le comentó Setién a “Marca” antes de enfrentar al prodigio.
-¿Te molesta que te llamen “el Messi del ajedrez”? -le preguntaron al pibe.
-No, porque me gusta Messi. Me molestaría que me llamaran “el Ronaldo del ajedrez” porque mé gusta más Messi. Me gusta más el Barsa que el Madrid por Messi.
Carismático de sobra, Faustino Oro traerá su ajedrez y su sonrisa a la Argentina a fines de noviembre, para ser el más joven de la historia en participar en la final del Campeonato Argentino. Lo que se viene será mejor.