Atlético Mineiro será el rival de River en la semifinal de la Copa Libertadores de América. El elenco que dirige Gabriel Milito superó 2-0 a Fluminense, que había ganado 1-0 en la ida, y la actuación del local le debe haber encendido una gran señal de alerta a Marcelo Gallardo: el vencedor jugó un partidazo para dejar en el camino al Flu, el vigente campeón.
Atlético Minero había sido uno de los mejores equipos de la zona de grupos. Los futbolistas del elenco de Belo Horizonte captaron rápido los conceptos ofensivos de Milito. En la fase inicial, se impusieron en 5 juegos y solo cayeron 2-0 ante el sorprendente Peñarol en Montevideo.
Claro que el Mineiro sembró varias dudas luego de la flaca serie ante San Lorenzo por los octavos de final: pasó sin merecerlo. El Ciclón jugó mejor en Argentina y en Brasil y no superó la instancia por la mala fortuna y por algunos groseros errores.
El andar errante del Galo siguió en la ida contra el Fluminense, en la caída 1-0 en el Maracaná. Pero este miércoles Mineiro volvió a brillar y a meter miedo: pasó por arriba al conjunto comandado por Luiz Menezes. Los de Milito, que fallaron un penal a poco de iniciado el juego, patearon 25 veces al arco defendido por Fábio.
El ingresado Deyverson (entró por el lesionado Bernard) fue el héroe al anotar el doblete. Uno fue de cabeza y el otro tocando de zurda sobre el segundo palo. En uno el centro vino desde la izquierda y en el otro desde la derecha.
Mineiro -que marcha noveno en el Brasileirao- ya se parece a un típico equipo de Milito: ataca, ataca y ataca. Este miércoles se plantó con un 3-4-3, con los verticales Paulinho y Bernard como extremos para asistir al potente Hulk. ¿Juegan argentinos? Sí: Rodrigo Battaglia es el líbero en la línea de 3 y Fausto Vera uno de los volantes centrales. El jugador clave, igual, es Gustavo Scarpa, un volante zurdo de 30 años que la rompió en Palmeiras un par de años atrás y que se puede mover por cualquier sector. Además, tiene une pegada de crack.
No lo atacaron a Mineiro y ese es un punto al que deberá atender Gallardo de cara a las semifinales de finales de octubre. Se jugará la ida en Brasil, entre el 22 y el 24, y la revancha en Núñez, entre el 29 y el 31. No lució bien la defensa del local las pocas veces que la inquietaron. Incluso San Lorenzo pudo desnudar esas falencias. De todos modos, se presume peligroso plantear un duelo de golpe por golpe ante los de Belo Horizonte por la jerarquía de sus atacantes.
Una noche volvió Atlético Mineiro, el señalado como el gran cuco de la Libertadores una vez terminada la fase grupos. Deberá transpirar River, entonces. También deberá trabajar Gallardo para ganarle la pulseada a Milito, un técnico estudioso y con quien ya supo tener algún duelo picante. Hasta ahora, los entrenadores se enfrentaron en 9 oportunidades con 5 victorias para el Muñeco, 3 para el Mariscal y un empate.