La mujer más rica de Rusia y fundadora del mayor minorista en línea del país, Tatyana Bakalchuk, este miércoles acusó a su esposo y socio, Vladislav Bakalchuk, por un tiroteo que ocurrió en las oficinas de Moscú. Según la empresaria, el incidente, que dejó dos muertos y siete heridos, surgió por una disputa alrededor del futuro de la compañía, Wildberries.
La mujer sostuvo, en un anuncio que realizó a través de Telegram, que el tiroteo inició luego de que su esposo y un grupo de personas ingresara al edificio. La pelea surgió hace dos meses, cuando Wildberries se fusionó con Russ, una empresa de publicidad en espacios exteriores, para crear una plataforma de comercio digital. Fue en un acuerdo supervisado por Maxim Oreshkin, jefe adjunto de la administración presidencial, y el Kremlin declaró que tuvo la aprobación del presidente Vladimir Putin.
Tatyana es propietaria mayoritaria de la empresa, mientras que Vladislav solo posee un pequeño porcentaje. Aunque ambos se encuentran casados, la mujer solicitó el divorcio en julio de este año. La empresa, que en sus comienzos era una plataforma en línea de reventa de ropa, ahora suministra cualquier tipo de objetos -que van desde utensilios de cocina hasta electrónica- y factura millones de dólares. Según la revista Forbes, Tatyana es la mujer más rica de Rusia.
Vladislav se opuso fervientemente a la fusión. En una publicación realizada por Tatyana y Wildberries, afirmaron que un grupo de personas armadas, dirigidos por Vladislav, ingresaron por las fuerzas a las oficinas y se enfrentaron con los guardias de seguridad. Aun así, el hombre se defendió y aseguró que los guardias de la empresa fusionada habían disparado contra él y sus colegas -lo que, según Vladislav, puede verse en las cámaras de seguridad-, que iban desarmados para hablar de negocios. “Amigos, intentaron atacarnos a mí y a mi equipo cuando llegamos a la oficina en Romanov Lane para negociar el fin de la construcción de almacenes. Estoy bien, lo resolveremos. Espere detalles”, escribió Vladislav en su canal de Telegram.
Ante esto, Wildberries publicó imágenes y videos desde el interior del edificio donde se ve un enfrentamiento entre un grupo de hombres al final de un pasillo y, además, se escuchaban tiros. También sostuvieron que no había ninguna reunión de negocios programada con Vladislav. A esto se sumaron los videos difundidos en redes sociales, donde se escuchaban disparos y se veía a hombres sacando armas de fuego.
“No tenemos secretos. Por lo tanto, pido que se hagan públicos los resultados de la investigación sobre los motivos de las acciones de las personas que organizaron este caos”, escribió Tatyana en Telegram. Los incidentes terminaron con la detención de casi 30 personas, según la agencia de noticias estatal rusa RIA, dos muertos -uno de los cuales era un guardia de seguridad- y siete heridos -de los cuales dos eran policías.
Tras los hechos, el Comité de Investigación de Rusia abrió una causa penal. La comisión se encarga de investigar delitos graves. Desde el canal de Telegram de Vladislav, sus abogados comunicaron que no se encuentra detenido ni arrestado y que dichos rumores correspondían a “información falsa”.
Con información de Reuters
LA NACION