JERUSALÉN.- El Ejército israelí anunció el martes un ataque aéreo contra líderes del grupo terrorista Hamas, sin especificar oficialmente dónde fue, aunque funcionarios señalaron off the record que tuvo lugar en Doha, donde el grupo tiene su base política y donde se escucharon explosiones.
En un comunicado, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) y el Shin Bet -la agencia de seguridad interior de Israel- anunciaron un ataque contra los líderes de Hamas perpetrado por la Fuerza Aérea Israelí.
“Los miembros de la cúpula atacada lideraron las actividades de la organización terrorista durante años y son directamente responsables de la masacre del 7 de octubre y de librar la guerra contra el Estado de Israel”, afirma el comunicado.
El Ejército menciona además que tomó medidas para mitigar los daños a civiles en el ataque, incluyendo el uso de munición de precisión y otros datos de inteligencia.
Más tarde, funcionarios israelíes confirmaron a las agencias AP y Reuters y al diario The New York Times que el ataque tuvo lugar en Doha.
Según el diario The Jerusalem Post, citando a una fuente oficial en off the record, Khalil al-Hayya, líder de Hamas en el exilio y principal negociador, fue uno de los objetivos del ataque.
Horas después, Hamas afirmó en un comunicado que cinco de sus miembros murieron en el ataque en Doha, incluido el hijo del líder, sin dar más precisiones sobre los otros fallecidos, pero agregó que Israel “fracasó” en su intento de asesinar a la delegación de negociación del grupo.
Una alta fuente de Hamas señaló a Al Jazeera que los líderes de Hamas fueron atacados mientras discutían la propuesta del presidente estadounidense Donald Trump para un alto el fuego en Gaza. Luego, fuentes del grupo afirmaron a la misma cadena y a la agencia Reuters que todos los miembros del grupo sobrevivieron.
Sin embargo, el canal saudita Al-Hadath había informado anteriormente que varias figuras importantes de Hamas, entre ellas Khalil al-Hayya, Khaled Mashaal, Zaher Jabarin y Nizar Awadallah, habían sido asesinados.
Medios palestinos dan cuenta de dos muertos en el ataque, que identificaron como Himam al-Hayya -hijo de Khalil al-Hayya- y Jihad Labad, director de la oficina de Al-Hayya.
Según la oficina del primer ministro Netanyahu, el ataque fue una operación completamente israelí.
“La acción de hoy contra los principales cabecillas terroristas de Hamas fue una operación israelí totalmente independiente”, dice el breve comunicado, difundido también por redes sociales. “Israel la inició, la llevó a cabo e Israel asume toda la responsabilidad”.
Netanyahu luego afirmó afirma haber ordenado el ataque tras los recientes ataques en Jerusalén y Gaza.
En un comunicado, el primer ministro dijo que los ataques estaban “totalmente justificados” y que la decisión recibió luz verde al mediodía local tras identificar una “oportunidad operativa”.
Más tarde, durante un evento en la Embajada de Estados Unidos en Jerusalén, Netanyahu, afirmó este martes el ataque contra altos cargos del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamas) en la capital de Qatar, Doha, “puede abrir la puerta al fin de la guerra en Gaza”.
“Israel ha aceptado la propuesta del presidente (estadounidense, Donald) Trump, para poner fin a la guerra, empezando por la liberación de todos nuestros rehenes, que llevan cautivos en Gaza más de 700 días. Si aceptan la propuesta de Trump, la guerra puede terminar inmediatamente”, declaró.
Este martes, la rama armada de Hamas reivindicó el atentado del lunes en Jerusalén, que costó la vida a seis israelíes, entre ellos, una mujer nacida en la Argentina.
“Las Brigadas Al-Qassam se atribuyen la responsabilidad del ataque a tiros que tuvo lugar ayer por la mañana, lunes (…), cerca del cruce de la colonia de Ramot”, indicó en un comunicado.
Además, funcionarios israelíes declararon a ese medio que Estados Unidos conocía el ataque de antemano y le dio luz verde, algo que la Casa Blanca todavía no confirmó.
En su primer comentario tras el ataque, la Embajada de Estados Unidos en Doha emitió una orden de confinamiento para todos los ciudadanos estadounidenses en Qatar.
Varias explosiones se sintieron el martes en Doha, según señalaron testigos. Columnas de humo negro se elevaban desde la gasolinera Legtifya, mostraron imágenes compartidas en las redes sociales. Justo al lado hay un pequeño complejo residencial que ha estado vigilado por la guardia del emir de Qatar las 24 horas del día desde el comienzo del conflicto de Gaza.
En tanto, Qatar condenó “en los términos más enérgicos” el ataque, según un comunicado de Majed Al-Ansari, portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Qatar, que a su vez afirmó que el bombardeo afectó a edificios residenciales que albergaban a varios miembros de la oficina política de Hamas.
“Este ataque criminal constituye una flagrante violación de todas las leyes y normas internacionales y una grave amenaza para la seguridad de los qataríes y los residentes de Qatar”, afirma el comunicado.
“Si bien condena enérgicamente este ataque, el Estado de Qatar afirma que no tolerará esta conducta imprudente de Israel ni su continua manipulación de la seguridad regional, así como cualquier acción que atente contra su seguridad y soberanía. Se están llevando a cabo investigaciones al más alto nivel y se anunciarán más detalles tan pronto como estén disponibles”, dice el comunicado.
Más tarde, el Ministerio del Interior de Qatar afirmó que las explosiones registradas en Doha “fueron resultado de un ataque contra una sede residencial de Hamas” y que la situación ya era “segura”.
Por su lado, el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Irán -aliado clave de Hamas- calificó el ataque en Qatar de “peligroso” y “violador del derecho internacional”, según informaron medios iraníes.
Según el ministro de Exteriores jordano, Ayman Safadi, se trata de “una extensión de la brutal agresión israelí que amenaza la seguridad y la estabilidad de la región”.
También el líder de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) condenó el ataque, que “se considera una amenaza para la seguridad y la estabilidad en la región”, declaró el secretario general de la organización, Hussein al-Sheikh.
El secretario general de Naciones Unidas, Antonio Guterres, se sumó a la condena y habló de una “flagrante violación” de la soberanía de ese emirato.
“Acabamos de enterarnos de los ataques de Israel en Qatar, un país que ha jugado un papel muy positivo en busca de un cese el fuego y de la liberación de todos los rehenes. Condeno esta flagrante violación de la soberanía y de la integridad territorial de Qatar”, dijo Guterres a la prensa. “Las partes deben trabajar todas para lograr un alto el fuego permanente, no para destruir”, añadió.
La dirigencia exiliada de Hamas ha estado durante mucho tiempo basada en Qatar, que a su vez ha servido como mediador en las conversaciones entre Israel y el grupo terrorista durante varios años, incluso antes de la última guerra en la Franja de Gaza.
Un ataque a su alta dirigencia podría complicar aún más las negociaciones sobre un alto el fuego en Gaza y la liberación de rehenes tomados en el ataque de Hamás del 7 de octubre de 2023.
Los funcionarios israelíes han enviado mensajes contradictorios a lo largo de la guerra, confiando en la mediación qatarí mientras también cuestionan su disposición a presionar a Hamas.
A principios de esta semana, el presidente estadounidense Donald Trump declaró que estaba dando su “última advertencia” a Hamas respecto a un posible alto el fuego, mientras funcionarios árabes describieron una nueva propuesta estadounidense. Un alto funcionario del grupo la calificó como un “documento de rendición humillante”, pero el grupo dijo que discutiría la propuesta y respondería en unos días.
La propuesta, presentada por el enviado de Trump para el Medio Oriente, Steve Witkoff, pide un fin negociado de la guerra y la retirada de las fuerzas israelíes de Gaza una vez que los rehenes sean liberados y se establezca un alto el fuego, según funcionarios egipcios y de Hamas familiarizados con las conversaciones, quienes hablaron con The Associated Press bajo condición de anonimato para discutir las conversaciones a puerta cerrada.
El ataque contra Doha confirma la expansión de las operaciones militares de Israel en la región. El país ya tiene frentes abiertos en Gaza, el Líbano, Siria y Yemen.
Además, la vasta base aérea de Al-Udeid en Qatar, sede del cuartel general avanzado del Comando Central de Estados Unidos, fue atacada por Irán durante la guerra de 12 días entre Irán e Israel que vio a bombarderos estadounidenses atacar sitios nucleares iraníes.
Agencias AP, Reuters y The New York Times

