Mientras los medios de todo el mundo publicaron la decisión de la Corte Suprema que ratificó la condena a Cristina Kirchner, los líderes internacionales, algunos de ellos aliados de la expresidenta que irá a prisión, reaccionaron de a poco a la noticia.
La primera reacción oficial de un gobierno hasta ahora llegó de Cuba, desde donde se pronunció el canciller Bruno Rodríguez.
“Reiteramos nuestro apoyo al pueblo argentino en defensa de la soberanía y la dignidad. La condena contra Cristina Fernández de Kirchner es un claro acto de venganza y amenaza”, dijo en X.
El único presidente en funciones que se pronunció públicamente sobre el tema fue el de Bolivia, Luis Arce.
“Desde Bolivia expresamos nuestro firme apoyo y solidaridad con la hermana @CFKArgentina, frente a un evidente uso de la justicia como herramienta para socavar las fuerzas de izquierda y del campo nacional popular. Reafirmamos nuestro respaldo a la soberanía y a la dignidad del hermano pueblo argentino», escribió el mandatario, antiguo delfín y actual rival del exmandatario Evo Morales.
En tanto, en Brasil, el Instituto Lula se pronunció y emitió un comunicado solidarizándose con Cristina Kirchner y “todos aquellos que luchan por la justicia y democracia en América Latina”. “Una denuncia impulsada por el gobierno del expresidente Mauricio Macri, plantea alarmantes dudas sobre la imparcialidad del sistema judicial argentino. La falta de pruebas y la presencia de indicios de parcialidad y arbitrariedad en el juicio son factores que comprometen la legitimidad de la decisión. Es inaceptable que una persona inocente sea condenada en un proceso que parece más una maniobra política que una auténtica búsqueda de justicia“, declaró.
Además, señaló: “La construcción de teorías jurídicas que buscan responsabilizar a Cristina Kirchner por los actos de sus subordinados, bajo una interpretación cuestionable del derecho administrativo, representa un peligroso retroceso en relación con la separación de poderes y el Estado de derecho. Esta práctica no solo afecta a la expresidenta, sino que también ensombrece el funcionamiento de la democracia en la Argentina, amenazando el equilibrio de poderes y la propia democracia“.
El expresidente boliviano Evo Morales, un aliado regional de Cristina que también fue inhabilitado, expresó “con profunda indignación” su “solidaridad con la hermana Cristina, su familia y el pueblo revolucionario de Argentina”.
“La condena injusta de seis años de cárcel e inhabilitación perpetua no es otra cosa que persecución política para proscribir a una lideresa del pueblo”, dijo Evo en una publicación en X.
“Vivimos una reedición del Plan Cóndor: ya no son los militares al servicio del imperio, ahora son jueces serviles a las oligarquías quienes ejecutan golpes judiciales contra quienes defienden la soberanía y los derechos de las mayorías”, continuó. “Llamamos a la unidad y movilización del pueblo argentino en defensa de la democracia. Cristina no está sola. Desde el corazón de la Patria Grande, nos sumamos a la lucha contra el lawfare y por una América Latina libre, digna y soberana”.
Exiliado en Bruselas y con pedido de captura en Ecuador, el expresidente Rafael Correa también publicó en X posteos en apoyo de Cristina.
“¡Fuerza, Cristina!¡Fuerza, Argentina!¡Basta de lawfare! Derrótennos -si es que pueden- en las urnas», dijo el exmandatario ecuatoriano.
El partido Podemos, que integra la coalición de Pedro Sánchez en España, denunció “golpismo” y “una guerra sucia judicial” en la Argentina
La secretaria general de Podemos, Ione Belarra, lamentó que en “todos los lugares del mundo” ocurra lo mismo.
“Guerra sucia judicial contra las y los dirigentes populares que nunca se vendieron al poder y estuvieron al lado de su pueblo”, expresó la dirigente de la formación morada, que ha mostrado de esta manera su apoyo a la expresidenta argentina. “Contra la ofensiva reaccionaria, alianzas internacionales para construir derechos”, reclamó.
Para la secretaria política de Podemos, la eurodiputada Irene Montero, la condena a Cristina Fernández es “golpismo” y una “guerra sucia judicial y mediática para que, golpeando a una, todo un pueblo renuncie a una vida con derechos”.
“La quieren presa y fuera de la política. A las fuerzas democráticas del mundo nos deben encontrar a su lado. Contigo, Cristina”, escribió la también exministra de Igualdad en un mensaje publicado en la red social X.