Luis Rueda, el presidente del Partido Bloquista —ese histórico organismo que hoy funciona más como boutique de acuerdos que como fuerza política— salió al ruedo con la verborragia desatada. Dijo, sin que se le moviera un solo rulo, que «el peronismo no es el partido más importante». Y lo dijo con una seriedad tal, que por un segundo, el mismo se lo creyó.
¿Que el peronismo ya no dirige la mesa? Puede ser. Pero que lo diga alguien cuya fuerza política hace años no dirige ni la fila en el Registro Civil es un acto de comedia involuntaria. El bloquismo hoy es como ese amigo que no pone plata para la pizza, pero exige elegir el sabor.
Rueda viene practicando un arte refinado: el de mear el fuego ajeno mientras arrastra el bidón propio. Se aleja del PJ como quien abandona un barco a la deriva… para subirse a una balsa que mantiene la bandera de Producción y Trabajo bien firme . Eso sí: antes de zarpar, mira a los libertarios con deseo, como quien no sabe si está buscando una alianza o una orgía ideológica.
“Nos acercamos al orreguismo porque es un espacio provincial”, explicó. Traducción: “Nos arrimamos donde hay calor, aunque sea de incendio”. Y por si eso no fuera suficiente, deslizó que una alianza entre Orrego y los libertarios “sería lo más conveniente”. Porque claro, nada grita “principios bloquistas” como abrazarse con los que quieren prender fuego el Estado con bidones de gasolina importada.
Mientras tanto, en el PJ, hay 13 intendentes, diputados, senadores y toda una estructura que —con todos sus quilombos— sigue siendo un jugador de peso. Pero Rueda, con la seguridad de un vendedor de espejitos, sentencia: “La política es ingrata, cuando te vas, ya no se acuerdan de vos”. Curioso: lo dice justo él, que parece que alguien no lo recuerda.
Luis sueña con el 2027 como si fuera el año de la redención bloquista. Spoiler: si siguen vendiendo principios por kilo y buscando sillas donde sentarse sin mirar quién está al lado, el bloquismo no va a resurgir: va a terminar como una página de efemérides, entre la creación del alfajor Capitán del Espacio y el debut de Zulma Lobato en Crónica.
Pero no todo está perdido. Rueda promete que, si hay “buenas propuestas para San Juan”, está dispuesto a relegar lugares. Noble gesto. Aunque la pregunta real es: ¿De qué lugar te pueden relegar cuando no tenés ni un banquito, ni de LLA ni de Juntos por San Juan?

